Ronda

Una pintura de Goya ilustrará el cartel de la encerrona de Morante en la Goyesca

El óleo «Lance de capa en un encierro» anunciará la próxima Feria de Pedro Romero

Imagen de la obra de Francisco de Goya que ilustrará la próxima Goyesca de Ronda
Imagen de la obra de Francisco de Goya que ilustrará la próxima Goyesca de Rondalarazon

Un genio del pincel para ilustrar a un genio del capote. La obra de Francisco de Goya «Lance de capa en un encierro» ilustrará el cartel de la próxima Feria de Pedro Romero de Ronda, en la que está incrustada como principal argumento la LVII edición de la Tradicional Corrida Goyesca rondeña en la que José Antonio Morante de la Puebla lidiará seis toros de distintas ganaderías en solitario.

La pintura, un óleo sobre hojalata de 43x31 centímetros que data de 1793, retrata al popular torero sevillano José Delgado «Pepe-Hillo» ejecutando un lance de capa por la espalda en el primer plano de la composición. En segundo término, figuran otros dos personajes, un picador y un subalterno con la guindaleta -lazo- que, como el matador, tratan de conducir hasta toriles a la manada de toros colorados que figura en último término en la puerta de chiqueros para concluir el encierro.

La obra está expuesta desde hace unos días en el museo de la Real Maestranza de Caballería de Ronda, situado en los bajos del coso rondeño, y pertenece a la denominada «Serie Torrecilla», puesto que a principios del siglo XX la mayor parte de las pinturas taurinas eran propiedad del marqués de la Torrecilla.

No obstante, su punto de partida obliga a remontarse a comienzos de 1794, fecha en la que Goya remitió a la Academia de San Fernando de Madrid una colección de once pequeños cuadros de gabinete, todos ellos pintados sobre hojalata y de similares dimensiones. El envío era un claro guiño para que sus profesores pudieran comprobar cómo el artista, recién superada la gravísima enfermedad -casi mortal- que sufrió en Andalucía y de la que quedó sordo, conservaba todavía sus plenas facultades para seguir desempeñando dignamente el empleo de pintor de Cámara del rey de España.

Junto a estas obras, el pintor adjuntó una expresiva carta a don Bernardo de Iriarte, viceprotector de dicha Academia, en la que explicaba que había realizado estas obras no sólo para intentar resarcirse de los grandes gastos generados por la curación de sus males, sino también para distraer su espíritu. Por este motivo, reconocía haber seguido su propio capricho e inventiva, tanto en la elección de los temas como en su ejecución. Una libertad de la que no podía gozar habitualmente en las obras de encargo.

Dicha colección remitida por el pintor español tiene distinta temática, desde varias escenas de diversiones nacionales hasta otras dedicadas al teatro ambulante o a la venta de marionetas, así como diversas pinturas, las más numerosas con un total de ocho, relacionadas con las fiestas de toros. Todas ellas repartidas por diversos museos y colecciones españolas e internacionales.