Idean un sistema inteligente de distribución de energía que reduce el consumo

Un equipo de investigadores de la Universidad de Alicante (UA) ha desarrollado y patentado un novedoso sistema de distribución de energía eléctrica, basado en una aplicación informática capaz de reproducir los procesos de inteligencia humana, que permite reducir el consumo eléctrico.

Esta innovadora tecnología, ideada por el grupo de investigación de Informática Industrial y Redes de Computadores de la UA, contribuye a una mayor eficiencia energética y se convierte en la forma idónea para entornos donde el suministro de electricidad fluctúa o es escaso, según han informado hoy fuentes de la UA.

El director del grupo de investigación, el profesor Juan Manuel García Chamizo, ha explicado que "la tecnología consiste en un sistema de control de distribución de electricidad, basado en técnicas de inteligencia artificial, es decir, una aplicación informática capaz de reproducir los procesos de inteligencia humana".

Dicho sistema posibilita la selección de las fuentes de energía más adecuadas, establecer a qué centros de consumo destinarlas en cada momento, operar automáticamente y, en función de las circunstancias, definir las fuentes energéticas más rentables y óptimas, entre otras tomas de decisiones.

La tecnología empleada está diseñada para aprender de las medidas correctoras introducidas por los usuarios y obtener información de fuentes externas, como Internet, para aplicar estrategias de gestión aún más refinadas.

"Se trata de una red inteligente que transforma las existentes en una bidireccional, donde energía e información fluyen en ambas direcciones entre generación y consumidor", ha señalado el profesor Chamizo.

De esta manera, es posible integrar las acciones de los usuarios que se encuentran conectados a ella (proveedores de energía eléctrica, consumidores y agentes que desempeñen ambos papeles) con el fin de lograr un suministro eléctrico eficiente, seguro y sostenible.

"Se reduce la factura de la luz, se recorta el consumo, se ofrece a los usuarios más información sobre el tipo de energía que usa e, incluso, permite a los consumidores producir su propia energía y venderla a las compañías distribuidoras", según Chamizo.

Todo el soporte software, que incluye la programación del sistema de inteligencia artificial, se ha desarrollado completamente, al tiempo que se han realizado simulaciones para validar el correcto funcionamiento del sistema.

Así, se han hecho pruebas de validación en escenarios reales: en viviendas unifamiliares, en otras equipadas con cuatro fuentes de energía y en un edificio de la Universidad de Alicante.

gra