Los peregrinos internacionales vuelven a caminar

El Camino de Santiago es un destino que históricamente ha atraído a peregrinos de todo el mundo. De hecho, hasta antes de la pandemia, las cifras oficiales revelaban que más de la mitad de los caminantes eran de fuera de nuestras fronteras.

Siempre existe un buen motivo para vivir esta experiencia; este año, más que nunca. La vida va volviendo poco a poco a ser como la conocíamos antes de que la pandemia de la COVID-19 pusiera en jaque al mundo entero y, además, de manera extraordinaria, 2022 vuelve a ser año Xacobeo y se nota en el Camino. Según las cifras registradas hasta ahora, los peregrinos y peregrinas están batiendo récords. En lo que va de 2022 son ya más de 150.000 los caminantes que han llegado a Compostela.

Galicia está de moda

No es la primera vez que una crisis sanitaria marca la historia del Camino. Ya en el siglo XIV Europa vivió una época muy oscura por culpa de “la peste negra”, que modificó la manera de vivir de unos 50 millones de personas.

Algo similar pasó hace dos años y hoy vemos cómo, de igual manera, el Camino vuelve a revivir y a resucitar su esencia. Tras el parón de 2020, este año está superando desde el mes de febrero los datos de compostelas de 2019. Mayo fue, de hecho, el mejor de la historia para el sector, con más de 766.000 pernoctaciones y 442.500 viajeros, el triple de los registrados el año anterior. En verano las cifras seguirán siendo buenas según las previsiones: el último fin de semana de junio ha reunido ya al mismo número de peregrinos que el mes de julio de 2019.

La Xunta de Galicia ya ha confirmado que la afluencia de turistas peregrinos está creciendo en todas las rutas y destaca no solo la seguridad del camino en cuanto a medidas sanitarias, sino también las facilidades a la hora de planificar el viaje utilizando, por ejemplo, la nueva plataforma online que permite localizar y reservar plaza el día anterior en los albergues públicos que se encuentran en la ruta.

Siguiendo las flechas amarillas

Naturaleza, actividad física, gastronomía, aventura, introversión… El Camino de Santiago tiene tantos atractivos que históricamente ha llamado la atención de turistas de todas partes del mundo. Aunque la situación en Asia todavía es complicada y, por tanto, no se han recuperado las altas cifras habituales de peregrinos procedentes de esta parte del mundo, sí que se nota cada vez más la presencia de vecinos europeos y de Estados Unidos. Quienes se animan a vivir esta inolvidable experiencia coinciden en que se trata de turismo totalmente seguro. La gran mayoría de quienes viven el camino quieren, además, volver.