Tribunal Constitucional

El Parlament llevará a la ONU las causas contra soberanistas

Los independentistas buscan lanzar una batalla jurídica internacional.

Puigdemont, ayer, en el Parlament de Cataluña
Puigdemont, ayer, en el Parlament de Cataluñalarazon

Los independentistas buscan lanzar una batalla jurídica internacional.

El reciente fallo del Tribunal de Estrasburgo a España por privar a Juan María Atutxa de defenderse en una vista antes de ser inhabilitado por el Tribunal Supremo ha envalentonado definitivamente a los independentistas catalanes para llevar su cruzada a instancias internacionales. El Parlament, con los votos de Junts pel Sí, Podemos y la CUP, aprobó ayer una moción en la que insta al Govern a trasladar una «queja formal» ante organismos como la ONU por los procesamientos de dirigentes como la presidenta de la Cámara catalana, Carme Forcadell, así como de varios miembros de la Mesa por impulsar un debate sobre la desconexión contraviniendo las instrucciones del Tribunal Constitucional.

En concreto, la moción aprobada ayer pide que la queja se traslade a los siguientes organismos: el Consejo de Europa, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, el Comité de Derechos Humanos, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, el comisario de Justicia de la Unión Europea y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Desde que comenzó el pulso político y jurídico a cuenta del proceso soberanista, los principales dirigentes de las fuerzas independentistas han asegurado que no se conformarán con las decisiones de la Justicia española y que llevarán sus causas a instancias internacionales para lograr algún tipo de amparo. Es, por ejemplo, la pretensión de Artur Mas, todavía en fase de recurso al Tribunal Supremo.

El texto aprobado manifiesta «el rechazo más enérgico a la escalada de amenazas y acciones por parte del Gobierno del PP», que suponen «una clara regresión democrática y que tienen por objeto más inmediato la intimidación a representantes electos y ciudadanos para impedir la celebración de un referéndum efectivo».

Estas acusaciones provocaron las protestas del PP. Su portavoz parlamentario, AlejandroFernández, criticó que se presente a España como un «país totalitario». «A nadie se le procesa por hablar, se le procesa por incumplir la ley», subrayó. En una línea parecida se expresó el portavoz de C’s, Carlos Carrizosa, que recordó que «cuando un político vulnera la ley, es como cualquier otro ciudadano», y pidió a los soberanistas que no busquen la «inmunidad» a través de mociones «vergonzosas» ni abonen la «falacia» de decir que España no es un Estado democrático. El diputado del PSC Ferran Pedret, por su parte, argumentó que no se puede decir que se «oprime» a nacionalistas o independentistas por sus ideologías cuando se debate «cada día» sobre estos asuntos. En cambio, la CUP reclamó la creación de una comisión internacional para denunciar el conflicto.