Andalucía

La Junta reclama al Gobierno “instrucciones y órdenes” claras sobre los protocolos en residencias de mayores

La consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, critica que Pablo Iglesias, como ministro de Derechos Sociales, no haya tomado aún desiciones que ayuden a controlar la situación

La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, en una imagen de archivo
La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, en una imagen de archivoJulián PérezAgencia EFE

La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, Rocío Ruiz, ha demandado este jueves al Gobierno central que saque unas “instrucciones y órdenes” claras para todo el territorio sobre los protocolos para las residencias de mayores ante la pandemia del coronavirus.

En declaraciones a CSTV, Ruiz ha criticado que el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, como ministro de Derechos Sociales, sólo haya acudido en una ocasión a la Conferencia Sectorial de Políticas Sociales, concretamente, “cinco minutos, leyó un texto y se fue”.

Ha criticado que esas conferencias se limiten a que cada comunidad exponga la situación que tiene, pero no se toman decisiones ni hay una coordinación por parte del Ejecutivo nacional.

En este sentido, ha reclamado al ministerio que, en lugar de lanzar recomendaciones, haga “instrucciones y órdenes” claras para todo el territorio, porque el Gobierno central está para “liderar” y coordinar.

Sobre la situación actual de las residencias de ancianos en Andalucía, la consejera ha señalado que el 95 por ciento está libre de casos de coronavirus en este momento.

Ha indicado que, a pesar de los obstáculos, se está llevando a cabo una gestión “razonablemente positiva” de la situación, adoptando medidas, como la coordinación con la atención primaria.

De otro, en relación con los posibles cierres de centro de Día como consecuencia de la pandemia, la consejera ha anunciado que, en breve, saldrán unas medidas de ayuda económica a mayores o personas de discapacidad para que puedan tener una asistencia personal en sus casas y sus cuidadores, el 80 por ciento mujeres, puedan conciliar.