Diseño
Pionera sala de radiología más precisa y menos invasiva para el paciente
La estancia del Hospital Quirónsalud Palmaplanas cuenta con un sistema de navegación arterial que reconstruye la anatomía en 3D para tratar de forma precisa lesiones vasculares y neurológicas
La estancia del Hospital Quirónsalud Palmaplanas cuenta con un sistema de navegación arterial que reconstruye la anatomía en 3D para tratar de forma precisa lesiones vasculares y neurológicas
La tecnología más puntera ya está al alcance del paciente en el hospital Quirónsalud Palmaplanas, situado en Palma de Mallorca, ya que el centro ha renovado su sala de radiología intervencionista con el mejor equipo existente en el mundo. En concreto, la nueva estancia de neurorradiología e intervencionismo cardiológico del hospital está equipada con el sistema «Allura Clarity FD20» de Philips, considerado por los expertos el mejor equipo actualmente para la obtención de imágenes en tres dimensiones. «Esta incorporación supone una clara mejora en la seguridad del tratamiento en pacientes complejos, debido al importante avance en la calidad de la imagen y en la decisiva reducción de la dosis de radiación a la que se expone el paciente», asegura Salvador Miralbés, jefe del Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Quirónsalud Palmaplanas.
El nuevo equipo cuenta con el sistema «Clarity» que permite la aplicación gradual y personalizada de los rayos X, en función de la técnica que requiera cada paciente, y el sistema «Dose Wise» que garantiza la mejor calidad de imagen con la aplicación de la menor dosis de radiación posible para el paciente y el especialista. «Esa reducción se consigue con un software que logra sacar mayor provecho de la información que se obtiene al irradiar al paciente», detalla Miralbés.
Esta pionera sala multiplica las posibilidades médicas de los especialistas que la emplean para la exploración, el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes en patologías como la angiografía coronaria, las ablaciones por radiofrecuencia, los estudios de electrofisiología, las intervenciones coronarias percutáneas, los cateterismos o la inserción de dispositivos implantables.
Nitidez de imágenes
A través de la nueva plataforma se garantiza, por ejemplo, la obtención de imágenes con la máxima nitidez para detectar la existencia de obstrucciones o estrecheces en la pared de las arterias coronarias. Así, es posible localizarlas con precisión, determinar el número de arterias afectadas, evaluar la gravedad de la lesión e intervenirlas implantando un estent o una malla metálica en la zona obstruida, todo en el mismo acto radiológico.
«La importancia en la mejora de la calidad de imagen es clave para poder valorar con precisión determinadas lesiones vasculares intracraneales, debido a que en ocasiones incluso tratamos lesiones de 1 o 2 milímetros de diámetro», explica Miralbés, quien detalla que «la mejora en la calidad de las reconstrucciones tridimensionales aporta mayor seguridad en estos tratamientos permitiéndonos incluso ‘‘navegar’’ en el interior de las arterias sin exponer al paciente a irradiación».
El equipo de radiología intervencionista dirigido por Miralbés también se beneficia de esta sala para la realización de la trombectomía mecánica. Esta técnica consiste en la extracción directa del trombo en caso de infarto cerebral, para restituir la circulación de la sangre al cerebro, lo que permite una recanalización del flujo sanguíneo en el 90% de los pacientes que sufren un ictus.
La nueva sala también supone un avance en cuanto a los estudios electrofisiológicos que permiten visualizar y diagnosticar las alteraciones del ritmo cardiaco o las arritmias al mapear la actividad eléctrica del corazón y determinar el lugar exacto en el que se producen las arritmias, así como los trastornos que tienen para el paciente. Al igual que en las angiografías o los cateterismos, la intervención se puede realizar de manera inmediata, lo que permite al especialista ofrecer un tratamiento personalizado.
Cuando un paciente acude a un centro hospitalario, resulta inevitable sentir cierto rechazo. Pero la tecnología es una buena herramienta para paliar esa percepción. Con el fin de hacer del paciente el gran protagonista de la sala, el hospital ha construido un espacio integral que combina un perímetro de luz LED con variedad de colores cálidos que se reflejan en unos paneles translúcidos colocados en el techo, y que proyectan imágenes relajantes, acompañado de un sistema de música ambiente que consigue crear al paciente una sensación de calma y control sobre la situación, lo que genera percepciones positivas y logra una predisposición más favorable a colaborar con el equipo médico.
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