Salud

Solo el 40% de los pacientes con fibrosis pulmonar idiopática sobrevive a los cinco años

Más de 8.000 españoles padecen FPI, que tiene una mortalidad superior a muchos tumores

Un signo inconfundible de la enfermedad respiratoria es el sonido crepitante similar al del velcro | Dreamstime
Un signo inconfundible de la enfermedad respiratoria es el sonido crepitante similar al del velcro | Dreamstimelarazon

Más de 8.000 españoles padecen FPI, que tiene una mortalidad superior a muchos tumores

Se calcula que la fibrosis pulmonar idiopática (FPI) puede tardar hasta dos años en ser diagnosticada porque sus síntomas suelen confundirse con otras enfermedades respiratorias de mayor prevalencia, como el asma o la EPOC. Sin embargo, existe un síntoma inconfundible para que los expertos en su abordaje den con la tecla de su detección y puedan tratarla cuanto antes y así garantizar una mayor eficacia de las terapias disponibles. Se trata del sonido crepitante de los pulmones cuando el médico ausculta al paciente con su fonendoscopio, similar al de las pisadas en la nieve o al de un velcro al despegarse. Para facilitar el conocimiento de esta enfermedad y de sus síntomas, la Asociación de Familiares y Pacientes de Fibrosis Pulmonar Idiopática (Afefpi) y Roche Farma han puesto en marcha la campaña “Dando en la tecla de la FPI”. Así, se podrá conseguir que más del 40% de los pacientes sobrevivan los siguientes cinco años.

Dificultad al respirar, tos seca y persistente que no cede en tres o cuatro semanas y dolor torácico son algunos de los síntomas más frecuentes de la FPI, aunque la pista inconfundible es el sonido característico de los pulmones al ser auscultados con un fonendo. El doctor Julio Ancochea, jefe del Servicio de Neumología del Hospital Universitario La Princesa (Madrid), insiste en la importancia de que los clínicos conozcan sus síntomas, “más concretamente los médicos de atención primaria, que constituyen la puerta de entrada del paciente con FPI a la ruta asistencial. Si estos expertos conocen bien la sintomatología de la enfermedad podrán derivar al paciente al neumólogo para ser tratados lo antes posible y garantizar el máximo potencial de las terapias disponibles actualmente”.

En este sentido, Claudia Valenzuela, neumóloga de la Unidad de Enfermedades Intersticiales de este mismo hospital, subraya la necesidad de establecer sistemas de derivación rápida entre atención primaria y un hospital de referencia con una Unidad de Enfermedades Intersticiales y recalca la importancia de la relación entre el médico y el paciente. “Esta relación ha de basarse en una correcta comunicación que permita al paciente entender su enfermedad y sus opciones de tratamiento, y al profesional la situación y necesidades de su paciente”, añade Valenzuela.

El abanico de profesionales sanitarios implicados en el manejo de la FPI es muy amplio: neumólogos, cirujanos torácicos, radiólogos, profesionales de la enfermería o psicólogos son algunos de los expertos con los que trata el paciente durante todo el proceso de su enfermedad y aportan a la FPI una perspectiva multidisciplinar en cuanto a su tratamiento. Mª José Beceiro, enfermera del Hospital Universitario La Princesa (Madrid), destaca que “la enfermería ayuda a facilitar la comunicación entre los pacientes y sus familiares, sirve de apoyo al cuidador principal”.