Aragón en el Hotel Miguel Ángel con un Garnacha insuperable

La semana pasada el Hotel Miguel Ángel de Madrid acogía una nueva puesta en escena gastronómico de la mano de la fantástica Pilar Betes y su concepto de experiencia y lujo sensorial ‘Espacio Gourmet 3.o’.

Después de conocerla con los productos de La Rioja este verano, Pilar no deja de superarse, y una vez más organiza una interesante cata de productos regionales de la Comunidad de Aragón.

No puedo no hablaros de mi flechazo con un monovarietal Garnacha. Sí: habéis leído bien. Los que me conocéis sabéis de sobra que me cuesta entenderme con esta variedad de uva. Sin embargo, y para mi gran sorpresa, ‘Viñedos y Bodegas Pablo’ han “parido” un 100% Garnacha que me ha seducido del todo: Menguante 2016.

Y es que no en vano este vino es considerado como uno de los 20 mejores vino del mundo cuyo precio está por debajo de los 20 euros según la revista Forbes. Previamente fue avalado por la Guía Peñín con 90 punto sobre 100 así como Advocate con 90 punto sobre 100, alcanzando la categoría de “vino excelente” en el primer caso y “vino sobresaliente” en el segundo.

Pero, retomando el caso de Menguante que pude degustar, tiene una graduación alcohólica de 14,48º, y presenta un color cereza claro; en nariz se aprecia frutos rojos con una curiosa base de cítricos y olores tostados. En boca, los expertos hablan de cosas como lo de “taninos maduros”. Para mí, en lenguaje de emociones, es un vino tierno, cariñoso y elegante.

No puedo obviar el maravilloso servicio del personal del Hotel Miguel Ángel que una vez más explica porqué es uno de los hoteles más transitados de Madrid.

Sobre los otros productos de Aragón...

Entre los entrantes de Teruel y Zaragoza se pudo degustar el jamón de Teruel D.O.P. ‘José Antonio Lascorz’, variedades antiguas y tradicionales de tomate de la Almunia de Dña. Godina ‘Huerta de Lugar’; los bocados de sueño de pastel de queso y almendra ‘ Pastelería Sanz’; o los vasitos de chocolate con foie y fruta escarchada Delicatessen del Altoaragón ‘Pastelería Loa’.

Los primeros platos de Huesca y Teruel fueron las tablas de salchichón con setas, longanizas de trufa y salchichón de pistachos de ‘Embutidos Ortín’; las tostas de jamón de pato con mermelada de limón con jengibre ‘Mermeladas Elasun’; la cucharita de mermelada de gin tonic con boquerón; las tostas de queso de cabra coronada con gelée de vino tinto de ‘José Antonio Lascorz’ y los chupitos de aceite variedad empeltre y arbequina de ‘Aceites Molino Alfonso’.

Entre los segundos de Los llanos del Hospital se pudo degustar las cazuelitas de garbanzos maridadas con verduras de la huerta de Aragón ‘Legumbre de La Hoya’; y de los terceros llama la atención especialmente el tartar de ternera del Valle de Aisa.

El toque dulce ha corrido a cargo de ‘Pastelería Sanz’ con la trenza de Mudéjar de Teruel, o de ‘Chocolates La Ofrenda’ con sus perlas de chocolate blanco limón y albahaca, la perla de chocolate negro, nuez pecana y chile ahumado, entre otras; también ‘Micheto’ con los surtidos de pastas almendradas o ‘Makarpi’ c0n surtidos de costelación café, así como los surtidos de manzanas de ‘Pastelería Loa’ o los paraguayos de ‘Jalonnature’.

Sobre la variedad de uva Garnacha

Grenache en francés, la Garnchada es una de las uvas más antiguas y plantadas en todo el mundo. Y, aunque siempre se aluda a la uva tinta, hay diferentes tipo de Garncha, como la blanca o la peluda, en la que hoy no me detendré.

De maduración tardía, precisa de un clima seco y cálido, de ahí que sea tan popular en donde se ha originado, España. También crece en Cerdeña, en el sur de Francia, en Australia y en California.

Se caracteriza en el paladar y en la nariz por un toque picante, por la pimienta blanca y por sabores a frutas rojas como la fresa y la frambuesa; la graduación alcohólica es bastante alta. Tiende a un color oxidado, y en boca presenta una importante acidez y taninos (sustancia química natural -vegetal- procedente de las partes más sólidas del racimo - como piel, hollejo, pepitas- o de la madera de las barricas).