OliPremium, pasarela de los mejores AOVES

He asistido a la cuarta edición de OliPremium, un espacio donde conocer los mejores aceites de oliva virgen extra (AOVE) de la nueva campaña, es decir zumos de aceituna de máxima pureza, celebrado en el hotel Palace de Madrid.

Un encuentro que da cita tanto a productores como a distribuidores, vendedores y consumidores, que buscan una solución a la falta de cultura que existe en España sobre nuestro oro líquido. No se le da el valor que se merece. Para que, de una vez por todas, el común de los mortales no se quede pensativo ante un lineal en el supermercado sin saber cuál elegir y sepa diferenciar entre un aceite de oliva y un AOVE, “organizamos visitas a nuestra almazara para que la gente sepa que el virgen extra no lleva ni un producto químico, mientras que el de oliva a secas, aporta un proceso de refinado. Es decir, se trata de un aceite que no se puede consumir, de ahí que se envíe a una refinería, se desodoriza, se decolora y se le añade aceite, que es el que otorga el aroma y el sabor para comercializarlo como aceite de oliva.

Asimismo, trabajamos mano a mano con numerosos cocineros, ya que son ellos quienes saben emplear las distintas variedades para según qué platos”, afirma José Martín, director de fábrica de Valderrama. Casa que presentó su Grand Cru, elaborado con arbequina, hojiblanca, picudo y ocal, así como ADN, diseñado por Alberto Chicote, además de un ejemplar con trufa natural infusionada, otro ahumado y un vinagre de Jerez, entre otros productos.

Las elaboraciones con olivos de picual, arbequina, hojiblanca y cornicabra han sido las más representadas. Sin embargo, he podido paladear zumos de otras variedades de aceitunas. Me ha llamado la atención Etieca, una pequeña producción formada por variedades de olivas centenarias que, a través de los siglos se han mantenido invariables al ser cultivadas con técnicas antiguas. Se trata de sevillenca, algo afrutada y dulce, morruda, más amarga, y farga, picante. Son las variedades endémicas de esta zona del Delta del Ebro, declarada reserva de la biosfera. Morisca es la aceituna con la que se elabora Molino de Zafra, un monovarietal de primera extracción que sólo se da en el sur de Badajoz. Como novedad, probamos una infusión de hoja de olivo, que baja la presión arterial, y el aceiterol ecológico, un producto único que une el aceite de oliva virgen extra ecológico con licopeno, principal antioxidante del tomate natural, ideal para aliñar una ensalada, por poner sólo un ejemplo. Grandes Pagos de Olivar reúne Aubocassa, Castillo de Canena, Hacienda Queiles, La Boella, Marqués de Griñón y Marqués de Valdueza, es decir, los mejores AOVE de nuestro país, como también lo son los ejemplares de Hacienda Guzmán. Álvaro Guillén, por su parte, nos regaló su reflexión. Se remontó “a la época de la dictadura, momento en que estaba prohibido exportar aceite, por lo que se fomentó el consumo interno de variedades que daban mucha cantidad sin tener en cuenta la calidad. Por eso, durante años los italianos crearon un producto de mucha calidad para exportarlo por el mundo. Además, se ha convertido en un alimento en el que el factor precio es importante. De ahí, que este tipo de salón ayude a considerar un aceite de oliva virgen extra como una materia prima excelente. Los hay que cuesta producir cinco veces más que otros”. Desde su fundación acerca a los consumidores sus distintos AOVES, elaborados con arbequina, hojiblanca y manzanilla, así como sus diferentes usos. “Hoy en día, se vende más aceite envasado español que italiano”, culmina. Una pasarela por los mejores aceites de oliva virgen extra. ¡Adelante!