Salud incorpora 180 camas del Hospital General de Cataluña para enfermos de Igualada

El portavoz del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM), Josep Maria Soto, ha anunciado la Conselleria de Salud de la Generalitat ha habilitado 180 camas en el Hospital General de Cataluña para pacientes de Igualada (Barcelona), destinadas a derivaciones para “disminuir la presión” por el brote del coronavirus en la zona confinada en la Conca d'Òdena.

En una rueda de prensa telemática este sábado, Soto ha asegurado que la incorporación de estas camas es "un balón de oxigeno para controlar presión" hospitalaria en Igualada y ha concretado que las 180 camas podrán emplearse en derivaciones a cualquier nivel de patología del enfermo, ya sea por ingreso convencional o en unidades de críticos.

También ha explicado que se han contratado a 23 profesionales de refuerzo en esta zona: cinco médicos, 11 enfermeras y siete técnicos asistenciales, y que se ha hecho "como medida excepcional".

Ha destacado que hay una línea de trabajo unificado sobre de UCI, y que ya han derivado a diez enfermos al Hospital General de Cataluña, y no ha descartado nuevos cambios en función de la evolución de la situación en la Conca.

REORDENACIÓN DE LA ATENCIÓN PRIMARIA

La gerente del Institut Català de la Salut (ICS) en Cataluña Central, Anna Forcada, ha asegurado que se también han decidido una “reordenación y optimización” de los centros de atención primaria (CAP) de la zona confinada.

Con ello se quiere garantizar que la población esté "bien atendida y tenga otro recurso sanitario donde ir", ya que se ha habilitado un recurso asistencial de radiología 24 horas en el CAP Anoaia de Igualada, y habrá un punto de atención en la calle, donde los profesionales derivarán a los enfermos.

Forcada ha destacado la coordinación entre el SEM, el ICS y el Hospital de Igualada y ha explicado que el CAP Vilanova acogerá las consultas pedriátricas y la atención a la salud sexual y reproductiva, en el marco de la reordenación de la atención primaria.

Ha sostenido que el personal de atención primaria se está reorientando, formando y “trabajando muchísimo” para hacer una atención más resolutiva y descongestionar, tanto de forma presencial como no presencial, mediante atención con llamadas de teléfono.