Coronavirus

Un “runner” a la Policía: “Me he saltado el confinamiento, ¿y qué?”

La Guardia Urbana detecta “runners” que casi entran corriendo a bancos y tiendas fuera de su franja permitida

The coronavirus disease (COVID-19) outbreak in Barcelona
en la imagen, personas practicando deporte en la Barceloneta, el pasado sábado. REUTERS/Nacho DoceNACHO DOCEReuters

Desde el pasado sábado el desconfinamiento por el coronavirus va por franjas horarias, dependiendo de las edades sobre todo, pero también hay horas específicas para las personas que quieran hacer deporte en solitario, la mayoría de ellos los conocidos como “runners”. Pese a que la mayoría de la ciudadanía cumple la normativa impuesta por el Gobierno, hay excepciones.

Fuentes de la Guardia Urbana explican a LA RAZÓN, siempre en referencia a este colectivo, que “trampas siempre han habido, de hecho desde el principio de la proclamación del estado de alarma”, ya hace 50 días. En esos días no estaba permitido el deporte al aire libre, pero algunas personas se las ingeniaban para salir a correr o ir en bicicleta. De hecho, las primeras multas en Barcelona llegaron el 15 de marzo, por el uso del citado vehículo.

Pese a que no son mayoría, la Guardia Urbana señala que las patrullas se encuentran con “runners” vestidos aún con su ropa de deporte, pero fuera del horario permitido. Los detectan corriendo, y cuando se les pregunta, ponen excusas varias.

De esta manera, van vestidos con su ropa de deporte, corriendo, y asegurando que van a realizar cualquier tipo de tarea, desde ir al banco, a comprar cualquier cosa o realizar algún recado, pero siempre sin dejar de correr. siempre fuera de sus horarios, e incluyendo a los ciclistas. No obstante, la Guardia Urbana insiste en que se trata de una minoría. La presión policial, dicen, ha ido provocando una disminución

No obstante, hay otro tipo de casos más graves, que son las personas que responden a los agentes con cierta vehemencia. Son ciudadanos que están practicando deporte en un momento en el que no pueden. Una frase más o menos habitual, dicen desde la Guardia Urbana, es “me he saltado y desconfinamiento, y qué?”. Se trata de un tipo de respuesta que acarrea una denuncia que puede derivar en sanción.