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Tradiciones

La romería a Santa Faz de Alicante bate récords con 350.000 peregrinos

El buen tiempo y la festividad anima a la participación

Romería de la Santa Faz La Razón

El buen tiempo, con temperaturas casi veraniegas, y la coincidencia con el Primero de Mayo han elevado la participación de la romería al monasterio de la Santa Faz de Alicante a más de 350.000, un récord histórico en esta peregrinación que se repite desde hace 536 años cada segundo jueves después de Semana Santa.

Así lo ha calculado al término de la misa solemne presidida por la reliquia junto al caserón del monasterio el alcalde alicantino, Luis Barcala, a partir de datos de la policía local, que indican que se estaría "por encima de los 350.000 (los participantes) esta mañana", a los que se sumarán muchos más a partir del mediodía.

El balance del alcalde se ha producido en uno de los patios del caserío del monasterio de Santa Faz junto a la vicepresidenta de la Generalitat, Susana Camarero, y el alcalde de Sant Joan d'Alacant, Santiago Román, en una jornada que ha contado con la ausencia del presidente, Carlos Mazón, por una misión comercial en Estados Unidos.

Aunque no en la comitiva oficial encabezada por el obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, y formada mayoritariamente por cargos de los partidos de derecha, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y líder del PSPV-PSOE, Diana Morant, y el portavoz en Les Corts de Compromís, Joan Baldoví, han participado en la festividad a primera hora del día, antes de acudir a la manifestación en la ciudad alicantina por el Primero de Mayo.

El alcalde ha explicado que hasta el mediodía se han efectuado 37 asistencias sanitarias, fundamentalmente desmayos y lipotimias, y que ninguna de ellas ha requerido traslado hospitalario, mientras que se han decomisado 70 litros de alcohol y un carro con bebidas de este tipo, una cantidad "magnífica" por las pequeñas cantidades que suponen dentro de una marea de personas tan cuantiosa.

Gran parte de las decenas de miles de romeros ha ido ataviados con el típico blusón negro de labrador y el pañuelo azul y blanco (colores de la ciudad). Precisamente algunos miembros de las comitivas de los partidos de izquierda han lucido este pañuelo con el lema 'Mazón dimisión' y los servicios municipales de protocolo, que han organizado el acto, les han pedido que no lo llevaran en las inmediaciones del monasterio, sugerencia que ha sido atendida parcialmente.

Barcala se ha referido a la declaración de la romería como BIC inmaterial y ha dicho que los trámites administrativos podrían ser culminados durante el presente mayo y que espera que para la próxima edición se haya conseguido este reconocimiento.

La vicepresidenta de la Generalitat, Susana Camarero, ha señalado sobre la ausencia de Mazón, que tiene la obligación de acompañar a las empresas valencianas en Estados Unidos en un viaje "que tenía programado" para ayudar a minimizar los aranceles anunciados por la administración de Donald Trump, y ha criticado que el PSPV-PSOE y Compromís hayan utilizado políticamente este asunto en un día de tradición y "devoción" y, en cambio, no se hayan referido a los últimos recortes del trasvase Tajo-Segura.

Camarero ha señalado que, además de traer "algún convenio muy importante en materia cultural" de Estados Unidos, el viaje de Mazón era una "obligación" dentro de sus responsabilidades institucionales, y ha continuado que, a la vuelta del viaje, este fin de semana recorrerá la romería y que durante este jueves ha estado "de corazón y de pensamiento" con los alicantinos.

Además de la vicepresidenta, del Consell han hecho la Santa Faz los conseller de Hacienda y Economía, Ruth Merino; de Justicia y Administración Pública, Nuria Martínez; de Emergencias e Interior, Juan Carlos Valderrama; de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira; de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, y de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus.

El presidente de la Diputación, Toni Pérez, ha sido otro de los cargos institucionales que ha recorrido los 8 kilómetros que separan la concatedral de San Nicolás de Bari y el monasterio dentro de un Año Jubilar que concede indulgencias a los peregrinos.

En la solemne misa, el obispo Munilla ha ofrecido la misa al papa Francisco, del que ha destacado su misericordia y que su fallecimiento ha reflejado "la falta de referencia de paternidad y maternidad espiritual" de la sociedad actual.

El peregrinaje a la Santa Faz se remonta al año 1489 cuando la reliquia (uno de los pliegues con los que la Verónica secó el rostro de Cristo camino del monte Calvario) se sacó en procesión para que los alicantinos rogaran que lloviera a causa de la gran sequía que sufría la zona, y se produjo 'el milagro de la lágrima' porque una lágrima brotó de la cara de Cristo.

La grúa le quita el coche al obispo

La anécdota de esra peregrinación ha sido que la grúa municipal se ha llevado el coche del obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, junto al monasterio alicantino que custodia la reliquia de la Santa Faz. El incidente ocurrió en la víspera de la peregrinación, este miércoles, después de que el obispo aparcara su vehículo correctamente junto al caserón del monasterio dentro de los preparativos para la peregrinación de hoy, donde la multitud camina en romería para venerar uno de los paños con los que, según la tradición cristiana, la Verónica secó el rostro de Cristo en su camino al monte Calvario.

El obispo ha explicado que la retirada de su coche se debió a que, dentro de las actuaciones del ayuntamiento para la señalización de la romería, operarios municipales pintaron la zona donde estaba "bien estacionado" junto al monasterio de Santa Faz y se llevaron el vehículo.

Tras la sorpresa y susto inicial, se enteró de lo sucedido para poder recuperar el coche, sin sanción económica alguna.

"No me han multado y me han pedido disculpas", ha recalcado Munilla, quien ve lo ocurrido como una "anécdota". "Que cosas como esta tengan que ser noticia quiere decir que no tenemos muchos problemas, y es buena señal", ha comentado.

No ha sido el único incidente con un coche en los últimos años de Munilla ya que en marzo de 2020, en pleno confinamiento por la covid-19 y cuando era obispo de San Sebastián, fue multado con 600 euros por la Guardia Urbana de la capital donostiarra por circular en un vehículo con un acompañante en el asiento delantero, lo que infringía en ese momento las normas del estado de alerta decretado para combatir la expansión del virus.