Sección patrocinada por sección patrocinada
Cine

Cine

«Men in Black», ya no es solo cosa de hombres

Chris Hemsworth y Tessa Thompson toman el relevo en esta nueva cinta de la saga que arrancó en 1997 en la que los alienígenas han logrado colocar un topo en la propia agencia de los hombres de negro.

«Men in Black»
«Men in Black»larazon

Chris Hemsworth y Tessa Thompson toman el relevo en esta nueva cinta de la saga que arrancó en 1997 en la que los alienígenas han logrado colocar un topo en la propia agencia de los hombres de negro.

Si algo distingue al cine americano de acción y ciencia ficción es su conocido empeño por presentar historias en las que sus protagonistas, por supuesto hijos de las barras y estrellas, salvan al planeta. En 1997, «Men In Black», con el dúo conformado por Tommy Lee Jones y Will Smith, conservaba esa premisa pero añadía un tono paródico, a veces directamente humorístico y gamberro (¿quién no se acuerda de aquel «besa mis peludas nalgas» del alienígena?) que daba nuevos aires al género, ya por entonces inmerso en el digital.

El éxito del filme impulsó otras dos secuelas, una en 2002 y otra en 2012. Pero, después de que el hilarante dúo fundacional decidiera colgar las gafas de sol y el traje oscuro, se presentó la oportunidad de introducir una nueva pareja de agentes y dar a la millonaria franquicia un cambio de imagen. Es así que llega «Men In Black: International», una nueva visión de la saga dirigida ahora por F. Gary Gray (que releva a Barry Sonenfeld), escrita por Matt Holloway y Art Marcum y producida por Walter F. Parkes y Laurie MacDonald, quienes han custodiado la serie desde su creación en 1997. La franquicia entra así en la cuarta entrega de las aventuras excéntricas basadas en el cómic de Lowell Cunningham y Sandy Carruthers, con una fascinante estética de serie B y un humor estrafalario.

En esta cinta, los Hombres de Negro se han extendido por todo el mundo, pero también lo ha hecho la escoria del universo. Y para mantenernos a salvo, el condecorado Agente H (Chris Hemsworth) y la novata Agente M (Tessa Thompson) pondrán a prueba sus dotes para coordinarse. Mientras se enfrentan a una nueva amenaza alienígena que toma la forma de cualquiera, incluida la de los Hombres de Negro, deberán unir fuerzas en una aventura mundial para salvar la agencia y al mundo entero. «Men In Black International» presenta nuevos agentes, alienígenas, armas y localizaciones. Asimismo, trae caras nuevas al reparto, como es el caso de Emma Thompson, que da vida a la jefa de los MIB, Liam Neeson o Rebecca Ferguson, entre otros.

Un tipo seguro de sí mismo

El australiano Chris Hemsworth explica que su personaje está pasado de revoluciones: «Tiene demasiada confianza en sí mismo, así como mucho sentido del humor. Prefiere no seguir ninguna regla, pues lleva saliéndose con la suya mucho tiempo. Así que es hora de que le den un toque de atención». Explica. Para los productores de la saga, Hemsworth era perfecto para interpretar al agente H: «Chris es un tipo autocrítico, carismático y gracioso y no hay muchos actores en Hollywood que reúnan todas esta cualidades. Además, tiene instinto para la comedia» afirman convencidos.

La presencia de Hemsworth supone un rejuvenecimiento al personaje que sería equivalente al que interpretaba Tommy Lee Jones. Del mismo modo, Tessa Thompson, como agente M, recoge el testigo de Will Smith y añade ese prurito MeToo que parece ser ya inevitable en todos los nuevos guiones de Hollywood. Thompson cree que su personaje aporta inteligencia e intriga a la relación que existe entre los dos agentes, que ya no son del mismo sexo. «Es literalmente la única persona fuera de MIB que sabe que hay alienígenas y pasa sus días buscando a esa organización misteriosa que conoció cuando era niña», señala.

«Estamos en una época en la que el cine popular habla de creación y expansión de los mundos», mantiene el productor Walter F. Parkes, reflexionando sobre por qué era el momento del retorno de «Men In Black». Después de ser la mano derecha de Steven Spielberg en «A.I: Inteligencia Artificial» y «Minority Report», Parkes es considerado una pequeña eminencia en el mundo de la ciencia ficción. Spielberg retoma también su rol de productor ejecutivo de la serie. Parkes cree que la franquicia añade un valor a las cintas de ciencia ficción actuales: «Básicamente tenemos a policías que vigilan a alienígenas escondidos en la Tierra. Al contrario que en las películas de superhéroes, que son fantásticas, nosotros podemos tener personajes principales que sean humanos».

Desde «Hombres de Negro III», surgieron varias vías para continuar la saga. Pero han pasado 7 años hasta que la idea final se concretó, arrancando con la historia de una joven que con seis años se encuentra con un alienígena pero evita ser «neuralizada». Un «neuralizador» es un aparato alienígena del tamaño de un bolígrafo que convenientemente usado borra de la memoria cualquier actividad extraterrestre. Ese punto de partida puso a los guionista a trabajar.

Un aire retro

Con nuevas localizaciones internacionales y una actualizada colección de cachivaches, esta secuela aporta un aire que recuerda a las películas de espías de los 60. «Cuando nos presentaron la idea de agentes secretos internacionales recordé la primera vez que vi ''James Bond contra Goldfinger''. Parecía lo correcto llevar ahí a los hombres de negro», señala el productor.

F. Gary Gray, director versátil y con un alto concepto del ritmo y la acción, responsable de cintas tan dispares como «Straight Outta Compton» y «Fast & Furious 8», aceptó el reto de relanzar esta franquicia. «Es capaz de llevar al éxito historias en cuatro géneros distintos. Después de la comedia ''Todo en un viernes'' vino el ''biopic'' musical de ''Straight Outta Compton'' y luego el taquillazo de ''Fast & Furious 8''. Aunque para mí, de sus películas la que más tiene que ver con ésta es ''The Italian Job'', una película estilosa y elegante que me recuerda a esos largometrajes de los 60 y 70», afirma Parkes.

Lo que no cambia es la apuesta por el tono cómico, por más que a Hemsworth le tense la cuestión: «Hay algo en la comedia que me aterra. Tienes que moverte en un rango algo alocado. Todo tiene que ser un poco más espontáneo. Cuando lo llevas al límite es cuando realmente funciona», asegura. El intérprete se rebela contra la idea de que el digital reste encanto al trabajo del actor en la ciencia ficción: «Es un premio poder ir a actuar y ver recreado un mundo tan increíble. No es solo una gran pantalla verde. Hay preciosos sets de rodaje, disfraces y prótesis que hacen nuestro trabajo mucho más fácil».