El Oso de Oro va en «Taxi»

Sergi Sánchez.- Jafar Panahi, que tiene prohibido abandonar Irán, se alza con el máximo galardón de la Berlinale. El premio lo recogió su sobrina, casi una niña

De esta decepcionante 65 edición de la Berlinale pueden extraerse tres conclusiones: la vitalidad creativa del cine latinoamericano; el esplendor de los personajes femeninos, al menos en lo que respecta a la escena cinematográfica europea; y la habilidad de Dieter Kösslick para salvarse de la quema incluso cuando el barco está ardiendo. Si el director de la Berlinale buscaba una foto de portada, el jurado presidido por Darren Aronofsky se la ha servido en bandeja de plata: la sobrina de Jafar Panahi, co-protagonista con su tío en «Taxi», llorando en el escenario del Berlinale Palast, levantando el Oso de Oro como si fuera Messi después de haber marcado gol. Panahi sigue sin poder salir de Irán, pero su familia le representaba en la platea. El premio es la guinda que corona el estrecho vínculo que la Berlinale ha tenido con la causa célebre de Panahi: en 2011, año en el que tenía que ser miembro del jurado, dejó su asiento libre en señal de protesta por su arresto y condena; en 2013 ganó el Oso de Plata al mejor director por «Closed Curtain» (ojo al dato: ya había ganado el Premio Especial del Jurado por «Offside» en el 2006); y este año el Oso de Oro premia, más que cualquier otra cosa, la obra de un hombre que no ceja en su empeño de hacer cine, cueste lo que cueste. Sería precioso que este gesto político tuviera consecuencias positivas para Panahi, pero quizá eso sería pedir peras al olmo.

Espléndida Charlotte Rampling

Las tres películas latinoamericanas a concurso se han ido con un Oso a casa, por otra parte muy merecido. Personalmente, «El club», en el que Pablo Larraín retrata sin concesiones el lado oscuro de la institución eclesiástica, debería haberse llevado el Oso de Oro, pero es un filme menos afín al consenso que «Taxi». Incontestables los premios a la mejor contribución artística por «Victoria», con su maratoniano plano secuencia de dos horas y veinte (que debería haber ganado en solitario: ¿por qué esa querencia por el cine ruso por parte de Aronofsky?), y la mejor actriz por Charlotte Rampling en «45 Years», extraordinaria. Tom Courtenay, que también está espléndido, se ha beneficiado de una selección que apenas ofrecía competidores en esa categoría. El Oso de Plata a la mejor dirección galardonó por partida doble al cine de Europa del Este: si en el caso de la rumana «Aferim!», Radu Jude se enfrenta con valentía a la confección de un western antiépico, rodado en blanco y negro y con ecos cervantinos, en el de la polaca «Body», Malgorzata Szumowska evoca al Kieslowski del «Decálogo» para hablar, con algún desliz en su tramo final, de la importancia del cuerpo para dibujar los límites de la identidad. En fin, un palmarés de lo más sensato para un festival plagado de insensateces.

Palmarés de la 65 edición del Festival de Cine de Berlín, la Berlinale

Oso de Oro a la mejor película: "Taxi", Jafar Panahi (Irán)

Oso de Plata - Gran Premio del Jurado: "El Club", Pablo Larraín (Chile)

Oso de Plata - Premio Alfred Bauer: "Ixcanul", Jayro Bustamante (Guatemala)

Oso de Plata a la dirección: Radu Jude, por "Aferim"(Rumanía) y Malgozata Szumowska, por "Body"(Polonia), ex-aequo.

Oso de Plata a la mejor actriz: Charlotte Rampling, por "45 Years"

Oso de Plata al mejor actor: Tom Courtenay, por (45 Years)

Premio a la mejor ópera prima: "600 millas", de Gabriel Ripstein (México)

Oso de Plata al mejor guión: "El botón de nácar", Patricio Guzmán (Chile)

Oso de Plata a la mejor aportación artística: "Victoria", de Sebastian Schipper (Alemania) y "Pod Electricheskimi Oblakami"(Rusia), de Alexey German.

Oso de Oro al mejor cortometraje: "Hosana", de Na Young-kil (Corea)

Oso de Plata al cortometraje: "Bad at Dancing", de Joanna Arnow (EEUU)

Jurados independientes:

Premio de la Crítica Internacional Fipresci: "Taxi", de Jafar Panahi (Irán)

Premio de la Confederación de Cines de Arte y Ensayo: "Que Horas ela Volta", de Anna Muylaert (Brasil)

Premio Teddy al cine homosexual: "Nasty Basty", de Sebastián Silva (EEUU/Chile)

Premio Teddy al cine homosexual (cortometraje): "San Cristóbal", de Omar Zúñiga (Chile)

Premio Teddy al documental homosexual: "El hombre nuevo", de Aldo Garay (Uruguay/Chile)

Premio Ecuménico: "El botón de nácar", de Patricio Guzmán (Chile/España)

Premio "Guild"a la creación artística: "Victoria", de Sebastian Schipper (Alemania)

Premio de los lectores de "Berliner Morgenpost": "Victoria", de Sebastian Schipper (Alemania)

Premio por votación del público Panorama: "Que Horas ela Volta", de Anna Muylaert (Brasil)