Tom Cruise, el gran héroe americano
A sus 53 años, el actor renace en la piel de Ethan Hunt, el protagonista de la saga «Misión Imposible». Nada se le resiste, no admite dobles en las escenas de acción y llega dispuesto a darle un buen bocado a la taquilla. Hay espía para rato. Por el momento, para una sexta entrega más
Tom Cruise sigue atrayendo a las masas. El actor parece tener de nuevo el toque del rey Midas con la nueva (que no última) entrega de «Misión Imposible». No sólo la película ha recibido buenísimas críticas, sino que también ha superado las expectativas de recaudación en su primer fin de semana de estreno, lo que significan buenísimas noticias para el actor, cuyos últimos filmes «Edge of Tomorrow» y «Oblivion» no fueron económicamente del todo bien en Estados Unidos, aunque sí internacionalmente, donde todavía tiene mucho tirón.
Para muchos norteamericanos, Cruise pasó de ser la mayor estrella del planeta a convertirse en su peor enemigo debido principalmente a su imagen pública. Aún lo tenemos en mente saltando en el sofá del programa de Oprah Winfrey declarando su alborozo por Katie Holmes. Todo esto ocurrió en una época en la que YouTube estaba empezando a dar el pelotazo y webs de cotilleo como TMZ exponían material que rozaban lo indecente. Al mismo tiempo Cruise despidió a su publicista personal, Pat Kingsley, una de las más respetadas en Hollywood, y la sustituyó por su hermana. Si a todo este súper batido proteico añadimos su pertenencia a la cienciología, el mareo ya requiere tomar asiento. Pero a pesar de todo esto, Cruise ha sabido sortear todos los obstáculos, poner la mejor de sus sonrisas y seguir trabajando lo más duro posible, en este sentido, merece un respeto como actor y productor. Si uno repasa su currículum la balanza se inclina hacía el lado positivo, incluso películas como «Entrevista con el vampiro» aguantan bien el paso de los años. Después no ha regalado buenos trabajos como «Magnolia», y «Nacido el 4 de Julio».
Enemigos de taquilla
El actor reveló recientemente en el «Daily Show» de Jon Stewart que habrá otra nueva entrega de la saga de espías. Sin entrar en detalles, él afirmó que probablemente se rodará en el verano de 2016. Tras los 56 millones recaudados en el primer fin de semana en EE UU no cabía esperar otra cosa. Parece que el cambio de fecha de estreno les ha beneficiado, pues la anterior entrega, «Protocolo fantasma» (2011) se estrenó en diciembre, sin embargo en esta ocasión, Rob Moore, vicepresidente de Paramount, pensó que era más apropiado el estreno en agosto tras el mega exitazo el año pasado durante ese mes de «Guardiane de la galaxia». Además, la competencia en diciembre de este año es de alto copete, con «Star Wars» a la cabeza y la nueva entrega de James Bond, «Spectre», que llegarán a las salas a final de año. La jugada, pues, del cambio de fechas les ha salido redonda.
Christopher McQuarrie, director del filme, tiene una consolidada relación con Cruise: le dirigió con anterioridad en «Jack Reacher» y es el guionista no sólo de ésta sino también de «Al filo de la mañana», «Valkiria» y esta nueva cinta de la factoría. Para él, uno de los aspectos más difíciles con los que tuvo que lidiar durante su colaboración con Tom Cruise fueron las escenas de riesgo. Como es bien sabido, el intérprete no utiliza un especialista, lo que podía complicar las cosas. «He trabajado con Tom varias veces y hemos hecho ya unas cuantas locuras, pero en esta quinta entrega ha sido cuando se me pasó por la cabeza que algo terrible podía suceder», explica el director, «pero lo cierto es que Tom tiene las cosas bien calculadas. Hasta cierto punto me he acostumbrado a mirarle antes de rodar una escena de riesgo y decirle: ¿lo tienes todo bajo control verdad?», sonríe McQuarrie. «Tom no es tonto, no hace estas escenas a la ligera», puntualiza. La cinta que hoy se estrena está plagada de escenas que hacen subir la adrenalina. Desde Tom Cruise colgado de un avión hasta persecuciones en moto que pondrían la piel de gallina hasta al mismísimo Dani Pedrosa. El propio actor reconoce que la escena del Airbus 400M del que se colgó a 5.000 pies de altura fue de lo más complicado que ha rodado nunca. Tuvo que ponerse incluso unas lentillas especiales, debido a la presión del viento, que le permitía abrir los ojos. El equipo técnico se aseguró de que no hubiera ningún pájaro que pudiera colisionar con el actor ni emisiones de humo. La misión de Cruise fue, nuevamente, posible.
Millones de dólares
Cruise ha demostrado a lo largo de todas las entregas de la saga «Misión: Imposible» que hacer las escenas de riesgo es una adicción. Han pasado veinte años desde que se rodara la primera dirigida por Brian de Palma (arriba, a la izda.) y coprotagonizada por Jon Voight y Emmanuelle Béart. El filme recaudó unos 457 millones de dólares en todo el mundo. La segunda entrega, dirigida por John Woo (arriba, a la dcha.) y coprotagonizada por la sensual Thandie Newton, es probablemente la que Cruise querría borrar de la saga, sin embargo recaudó sorprendentemente aún más que la primera, 546 millones. La tercera entrega, coprotagonizada por Michelle Monaghan, el fallecido Phillipe Seymour Hoffman y dirigida por el genial JJ Abrams (abajo, a la izda.), es de las que menos ha recauadado, 398 millones. La cuarta, que estuvo bajo la batuta del niño bonito de Pixar, Brad Bird, y cuyas críticas fueron muy favorables, cosechó 695 millones. No cabe la menor duda que el binomio Tom Cruise y su personaje en MI, Ethan Hunt, tienen la fórmula mágica.