Dalas Review: «Tuve mi primer ordenador a los tres años»

Tiene más de tres millones de seguidores en YouTube, 50 millones de reproducciones de sus vídeos al mes y está en el «Top Ten» de los canales de YouTube en España. Su primera novela es «Fugitivos en el tiempo».

He descubierto el nombre real de Dalas Review, pero no seré yo quien lo escriba cuando ya no lo pronuncian ni en su casa. El de Dalas no es un nombre de un personaje, sino el que utiliza el famoso «Youtuber» desde los doce años. «Sale de hacer una combinación con el nombre entero. Lo puedes hacer tú también con el tuyo. Básicamente, son las dos primeras letras de tu nombre, después la primera letra de tu segundo apellido y después las dos primeras letras de tu primer apellido al revés». Como ven, una cosa que se le ocurre a cualquiera... Está claro que Dalas no es un chico convencional. Y no sólo por el nombre elegido, sino sobre todo por ese uso tan personal que hace de Youtube desde hace tanto que se ha convertido en una estrella con más de tres millones de seguidores. «Cuando nació Youtube, en 2005, yo tenía once o doce años y empecé a hacer el tonto cogiendo ‘‘trailers’’ en otros idiomas y subtitulándolos al castellano pero con subtítulos que no tenían ningún sentido, ¿sabes? Lo que quería era hacer la broma y para ello subía cada vez más tonterías y estupideces, hasta que poco a poco llegué a lo de ahora». Se refiere a vivir de esos mismos vídeos a los que ya se dedica por completo. «Antes estudiaba Multimedia en la Universidad, pero tampoco aprendía nada, porque a mí me gusta ser autodidacta y todo lo que estaba haciendo ya me lo sabía». Dejó lo estudios en segundo, a pesar de las buenas notas. O quizás, porque llevaba incontables horas de pantalla previas a comenzar la carrera, y sabía todo lo que le estaban enseñando. «Me he pasado muchísimas horas delante del ordenador desde que tengo uso de razón. De hecho, mi primer ordenador en plan propio, para mi cuarto, fue a los tres años». No está precisamente recomendado por psicólogos y educadores. Seguro que a sus padres los habrían llamado al orden; pero a Dalas no parece que le hayan ido mal estas prácticas caseras. «Desde los tres años, empecé a hacer cosas. No desde el punto de vista de programación, sino más desde el de dibujos, diseños... De hecho, a los once o doce años fue cuando empecé a aprender cosas de diseño 3D, Photoshop y todo ese tipo de cosas. Desde entonces, simplemente me levanto un día y pienso: ¿cómo se hará no sé qué? Lo busco, lo aprendo y ya está». Ya es bastante difícil aprender en soledad; pero más aún dar en el clavo cuando se realizan tareas creativas y Dalas lo ha conseguido con sus trabajos y su forma de contar. «Antes lo que más me motivaba era exteriorizar cosas que me molestaban, mis opiniones. Pero ahora es como que todo lo que quería decir lo he expresado y lo que más me motiva es hacer vídeos y además tienen más éxito las cosas divertidas, en plan que todo el mundo se ría y pase un buen rato. Y yo me divierto un montón haciéndolos. Sobre todo algunas de las últimas recopilaciones que he hecho como de ‘‘fails de la arquitectura”, que son personas que han construido una escalera detrás de otras y cosas así». Dice Dalas que ya ha expresado cuanto quería y me pregunto si lo habrá hecho también respecto a la política; incluso si la política tiene interés para un «Youtuber»... «En cuestiones de política, la verdad es que me gusta ver los programas electorales de todos los partidos; pero lo que es votar, no voto, básicamente porque no encuentro que haya ningún tipo de partido que me llame lo más mínimo la atención. Y como también planeo irme de España, pues no me vale la pena estar perdiendo tiempo pensando para votar. Así que vivo bastante al margen de todo esto. Ya puede, con más de cincuenta millones de reproducciones cada mes y un trabajo sin jefe que sólo necesita conexión a Internet y se puede desarrollar en cualquier lugar del mundo donde la haya. Le pregunto por su mayor logro profesional. «De momento, estoy dentro del top diez de canales de España..., pero a mí lo que más me gusta como logro es haber escrito la novela, haberla publicado y que haya sido genial. En general, creo que mi éxito es escribir. Lo llevo haciendo desde hace mucho», no es que sea el único ‘‘Youtuber’’ que se ha metido a literato y que ha triunfado, pero es cierto que «Fugitivos en el tiempo» (Espasa), su novela, le ha salido tan bien que ya está con otra, «que yo creo que me está quedando incluso mejor. De hecho estoy planeando que sea una trilogía. Ésta va a ir de una niña de catorce años que todo el mundo piensa que está esquizofrénica porque ve cosas, pero en realidad esas cosas son reales dentro de un mundo que existe al mismo tiempo que el nuestro, pero donde usan la magia a través de escribir libros. Todo el libro es una metáfora sobre que si tú lees un libro se produce magia en tu cabeza y, si no lo leyeras, ese libro no sería mágico». Suena muy bien. Tanto como en su día «Fugitivos en el tiempo», esa historia sobre un delincuente informático que terminó atrapado en el invento más grande y terrorífico de la historia. Dalas, lo repito, es un chico distinto. Y sus lecturas tampoco son corrientes. «Lo que más suelo leer es estimulación científica o cosas acerca del espacio, la física cuántica... Ficción no leo mucho porque cuando lo hago, antes de terminar, pienso que yo podría escribir algo parecido y empiezo a hacerlo. Escribo mucha más ficción de la que leo». Todo esto resulta curioso en un tipo dedicado a hacer vídeos de humor todos los días... «Bueno, le dedico a los vídeos dos o tres horas al día y , sino no estoy muy inspirado y tengo que buscar más cosas, a lo mejor seis o siete..., pero el resto del día lo paso leyendo o escribiendo, o haciendo cualquier otra cosa. En realidad, de mi casa salgo poco».