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José Jiménez analiza el papel de la crítica de arte hoy en un ensayo

La Razón
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En «Crítica en acto» (Galaxia Gutenberg), José Jiménez, doctor en Filosofía y catedrático de Estética y Teoría de las Artes en la Universidad Autónoma de Madrid, quiere llamar la atención sobre el papel de la crítica de arte actualmente, pues «con los cambios en los soportes y en los canales de transmisión parece que estaría siendo desplazada. No sólo la artística, sino también la musical y la literaria, sobre todo en España». Para Jiménez «estamos necesitados de juicios críticos bien argumentados y valorativos, pues se tiende a sustituirlos por la noticia y la crónica, géneros que no invitan a profundizar sobre el conocimiento de las obras, lo que hace que la brecha abierta entre crítica y público se haga mayor». En su libro, también quiere poner de manifiesto que debe establecerse un diálogo con las obras y con el artista, «que tiene un planteamiento, un punto de vista indispensable para que el crítico profundice», asegura. El volumen está dividido en tres capítulos de alcance general referidos a España al que se añaden más de 80 textos específicos sobre artistas concretos.

Jiménez ha huido de redactar un manual sistemático «y, aunque sé que no están todos los que son, pero sí que son todos los que están. Estas páginas permiten dar visibilidad al arte que se está haciendo ahora en España», y al que se añaden, además de nombres de referencia para él, como son los de Juan Muñoz, Jaume Plensa y Cristina Iglesias, colectivos como El perro, ya desaparecido, y artistas como Sánchez Castillo, que adquirió el Azor y prepara una reciente exposición en Linz con este material. Se lamenta el filósofo de la deriva de nuestra sociedad hacia el espectáculo («es el reino de la imagen por la pura apariencia», señala), «lo que hace que el espacio dedicado a la crítica sea cada vez más constreñido». ¿Qué se puede hacer, ante esta situación? «Pedir más apoyo institucional, ofrecer más espacio para la crítica, que no puede ser libresca ni abstracta, sino bajar a tierra», dice Jiménez.