Juan Pablo Fusi: «La cultura hizo su transición antes de la muerte de Franco»

El historiador recuerda a Aranguren y Julián Marías en su ingreso en la Real Academia de Historia.

El historiador Juan Pablo Fusi ingresó ayer en la Real Academia de la Historia con un discurso centrado en el cambio cultural que se produjo en España en la década de 1960, en la que, «a pesar del franquismo», la cultura «supo conquistar ámbitos propios de libertad». Para el historiador, «La cultura española hizo su pre-transición cultural diez, quince años antes de la muerte de Franco, y se instaló en un horizonte moral e ideológico radicalmente distanciado del franquismo». Fusi calificó ese cambio de «hecho histórico trascendente» y señaló que tuvo su reflejo en la literatura, la filosofía, el arte y las ciencias sociales, contribuyó al restablecimiento de la democracia y alumbró «nuevas formas de entender y de explicar la realidad: nuevas formas, también, de repensar España», informa Efe. Fusi pertenece a una generación «nacida bajo el régimen de Franco, pero crecida “a la sombra de la democracia”». Unos historiadores que hicieron «del problema de la democracia en España tal vez la clave fundamental» de su preocupación historiográfica. A esa preocupación responde su discurso: «Espacios de libertad: la cultura española y la recuperación de la democracia (1960-1990)». El nuevo académico partió en su disertación del filósofo Julián Marías, quien en diferentes artículos y ensayos decía que, en torno a 1960, existía en España «una floreciente vida intelectual», gracias a los «esfuerzos sin cuento» de «unos cuantos grupos de intelectuales».

Antes de centrarse en su discurso, Fusi elogió la figura de Gonzalo Anes, su antecesor en la medalla número 15 y director de la Real Academia de la Historia desde 1998 hasta su muerte en marzo de 2014, y dijo que era «un investigador excepcional» y «un historiador de enorme talento». En la Academia, la gran obra de Anes fue «El Diccionario Biográfico Español». Una obra «colosal, ciclópea», como la ha definido la actual directora de la RAH, Carmen Iglesias, y que, según Fusi, «exigirá continuidad y actualización permanentes». «La obligación imponente» de los académicos es «mejorarlo», aseguró Fusi, que formó parte de la comisión que revisó esta obra tras la polémica que suscitó. Fusi señaló que no sabe aún cómo ha quedado la biografía de Franco ni «la treintena de voces» que la comisión recomendó mejorar, pero aseguró que «no cuesta nada rectificar aquella biografía».

El discurso de Fusi fue «un pequeño homenaje» a Julián Marías y a José Luis López Aranguren. Si una de las «obsesiones» del primero fue «España como preocupación», al segundo se le asocia con «la democracia como moral», una «doble herencia» de importancia vital para la generación de Fusi. Y si Marías en 1966 decía que el futuro había comenzado ya, Aranguren en un ensayo afirmaba que lo que «había ocurrido era “el triunfo tardío” de los que llamaba “los militarmente vencidos pero culturalmente superiores”, sobre los vencedores con las armas».