Carla Montero narra las crueles contradicciones de la guerra
Dice la escritora Carla Montero que «cada libro es un hijo, un parto». Pues su última novela, «El invierno en tu rostro» (Plaza & Janés), ha salido con más peso de lo normal, el que suman sus 768 páginas.
Dice la escritora Carla Montero que “cada libro es un hijo, un parto”. Pues su última novela, “El invierno en tu rostro” (Plaza & Janés), ha salido con más peso de lo normal, el que suman sus 768 páginas. El volumen es considerable, y eso que la autora asegura que eliminó una línea argumental. Pero es que nunca sobra espacio para contar una historia familiar. Montero ha tomado como inspiración la vida de su tío abuelo Luis que, comenta, “se alistó al Partido Comunista, luego se exilió a Francia y acabó en el campo de concentración de Mauthausen. Sobrevivió y al volver a España le mataron los de su propia ideología”, por lo que la escritora piensa que los líderes comunistas de entonces sólo lo eran “de cara a la galería, pero no se implicaban con las bases”. Por otra parte está su abuelo Pepe que, “fue voluntario en la División azul”, asegura.
La historia de estos hombres la ha novelado a través de los personajes de Lena y Guillén, dos hermanastros con una apasionante relación hasta que un suceso les separa y se reencuentran en varias ocasiones en un contexto bélico, siempre cada uno integrado en los bandos enemigos. Por ello, declara la autora que “el reto ha sido empatizar con los personajes y entender sus posiciones ideológicas”, tan distantes. Las guerras de mediados del siglo XX han sido objeto de numerosas novelas, películas... pero admite Montero que “habrá aún más” hasta que sepamos “lo que pasó para que la humanidad llegase esos límites tan extremos”.
Montero ha definido su nueva obra como “discolar”, ya que “es la que más me ha costado dominar, costó unos cuantos quebraderos de cabeza”. Finalmente ha conseguido controlarla y ha resulto una novela en la que hay aspectos tan llamativos como la historia de las enfermeras de la División Azul, tan poco tratadas en la literatura. Así, hay suficientes argumentos para que las ventas de “El invierno en tu rostro” (título inspirado en un verso de John Keats) superen los 100.000 ejemplares de su segunda novela, “La tabla Esmeralda”.