Amancio Prada: «El porvenir de un país depende de la Educación»

El cantautor berciano, con una triple cita la próxima semana en Valladolid, Santo Domingo de la Calzada y Burgos, recuerda a Santa Teresa cuando dice «lee y te conducirás, no leas y te conducirán»

Tras un periplo por tierras andaluzas donde cautivó al público granadino este pasado domingo en el Palacio de Carlos V con sus «Canciones del alma», el cantautor berciano Amancio Prada desembarca este viernes en tierras castellano y leonesas y riojanas en una triple cita en Valladolid, Santo Domingo de la Calzada y Burgos. Serán tres conciertos pero con dos programas distintos como señala a LA RAZÓN. «En el Monasterio de las Huelgas y en Santo Domingo de la Calzada, daremos el mismo concierto, el coro de RTVE interpretará el Réquiem de Fauré en la primera parte y luego cantaré con ellos el Cántico Espiritual. En Valladolid será muy distinto. Con Amarilis Dueñas al violonchelo y la colaboración de Juan Carlos Mestre, ofreceré un recital variado de canciones antiguas y recientes, clásicas e inéditas, trufado de anécdotas y poemas». «Será un guión donde no todo está previsto, sino abierto a la cordialidad del encuentro y al temblor de las estrellas como el claustro de San Benito», indica.

Aunque muchos le han catalogado como el gran cantautor de la poesía española, Amancio Prada, considera que su maestro, Paco Ibáñez, es el que debe contar con este reconocimiento, aunque agradece esta «muestra de consideración y afecto».

A la hora de componer, el artista berciano considera que los poemas a los que pone música «me salen al encuentro, se apoderan de mí y me resuenan dentro. Nadie elige su amor».

Eso sí, algunas canciones brotan a la primera, aunque a otras las tiene que dar más vueltas. «Mira, lo más importante es que suene natural. No se trata de añadir o poner música, sino de extraer, descubrir o incluso inventar su música callada».

Ha cantado a Rosalía de Castro, a García Lorca, a Jorge Manrique, a San Juan de la Cruz o a Santa Teresa de Jesús y a la hora de tener que elegir, asegura que se siente a gusto con todos. «Todos son uno. Cada poeta es un afluente de caudal lírico que va creciendo y que nos lleva. Canto lo que me enamora, lo siento y lo que pienso y creo en la música como una oración del alma del mundo».

«Como una vara verde»

A pesar de que lleva años sobre las tablas, asegura que tiembla «como una vara verde» cada vez que sube a un escenario a dar un nuevo concierto. «Cada actuación, cada concierto es único e irrepetible. Cantar es mi vida, es dar lo mejor que tengo, valga lo que valga y para lo que valga».

Y afortunadamente, confiesa que cada vez nota más gente joven los que acuden a sus conciertos, pese a que su música tiene un público particular. «Con frecuencia son adolescentes acompañados por sus padres y, cuando van, vuelven». Pero en lo que sí que se muestra crítico es con el valor que la sociedad actual, y la española en sí, da a la cultura. «Apartada es poco más bien diría maltratada. La cultura es conciencia crítica, y eso al poder no le interesa. ¿Qué atención le han dedicado los recientes debates electorales? Cuando el porvenir de un país depende de la Educación. Era Santa Teresa la que decía ‘‘lee y te conducirás, no leas y te conducirán. Nadie puede amar lo que no conoce’’. Pero no perdamos la esperanza», concluye.

Concierto: «La voz de los Poetas» y Requiem de Fauré y Cántico Espiritual, junto con coro y solistas de la ORTVE.

Cuándo: 8 de julio en Valladolid (Ciclo Noches de San Benito). 9 de julio Iglesia de San Francisco, en Santo Domingo de la Calzada. 10 de julio, Monasterio de las Huelgas en Burgos.