Barcelona

En el nombre de Whitney Houston

Nueve conciertos durante diciembre. El Georgia Mass Gospel Choir gira por España en homenaje a la actriz

Milton Biggham, 35 años al frente de Georgia Mass Gospel Choir
Milton Biggham, 35 años al frente de Georgia Mass Gospel Choirlarazon

El reverendo Milton Biggham exclama al teléfono: «¡Por supuesto que no hace falta creer en Dios para apreciar, sentir y comprender la música que hacemos!». Biggham, hombre de una simpatía contagiosa, es una eminencia en el género, pues lleva desde 1983 componiendo, cantando y dirigiendo el Georgia Mass Gospel Choir que él mismo fundó y con los que ha publicado 12 discos. «¿Quieres que te diga la verdad? La energía, desde hace 35 años la obtengo de Dios, que me da algo más que eso: me da la pasión necesaria», afirma. Su conjunto empieza una gira que les trae por Girona (11 de diciembre), Madrid (12 y 13), Gijón (14), Barakaldo (15), Vigo (17), La Coruña (18), Barcelona (21 y 22) y Mondragón (23).

La emoción del gospel, dice, es única en el mundo. «Es una espiritualidad que no se habla, no se dice, pero se entiende muy bien. Éste es un lenguaje que sólo pasa en este tipo de cantos espirituales. Es muy interesante porque vamos a España, y dos tercios de la audiencia no habla inglés, pero después de un concierto de una hora y media nos comunicamos. En ese momento nos entendemos todos, hablamos el idioma que hablemos. Cada concierto, amigo, es un milagro», señala. Para muchos, el gospel puede no haber evolucionado más allá del tópico de «Oh, happy day!» y esas canciones más viejas. «El gospel ha florecido. Es mucho más grande de lo que solía ser; con el gospel contemporáneo el sonido se ha expandido y estoy feliz de haber contribuido a hacerlo», afirma. ¿Cómo se consigue que un canto espiritual suene contemporáneo? «La clave, para lograrlo, ha sido múltiple, pero pienso que si hay algo más importante es vivir el ahora y expresar tus experiencias del día con Dios. Cuando hablas de tus sentimientos de cada día con Él, estás siendo contemporáneo. Yo no vivo de las experiencias del ayer, ésas ya se fueron. Pero sí puedo expresar ante Dios cómo me siento». Tres generaciones de su familia cantan. «Mi nieto es predicador y cantante. Ama la música gospel, y de su generación también tenemos muchos cantantes». Basta con querer unirse para poder cantar. «Somos una gente cálida, que recibimos al que quiere acercarse a nosotros, así que en realidad no necesitamos ir buscando a nuevos cantantes para que se unan. Las puertas están abiertas. Entran en nuestra iglesia y descubren la relación tan única que se establece en un coro: no hay nada igual en el mundo, no se parece a nada más porque estamos hablando de personas que cantan juntas por una causa común: llevar alegría y buena voluntad a todos. Ése es el mensaje», explica Biggham.

Los Juegos de Atlanta y una película

El gospel es una manifestación cultural genuinamente americana: «El gospel tiene lo que da. Es longevo y lo seguirá siendo, nunca morirá. Cuando vamos a España, encendemos la vela que hay dentro de los corazones de los que están viéndonos. Y esas personas, de las que no sabemos sus nombres, ni dónde viven, ni probablemente hablemos el mismo idioma, saldrán de allí y expresarán lo que han visto. Y con sus palabras serán capaces de prender en otras personas los sentimientos que les hemos despertado. Y esa luz pasará a otros corazones y así siempre. Esa gente es la que nos mantiene vivos, y de esa manera podremos seguir iluminando», afirma. Biggham ha grabado discos, los ha producido, ha cantando en la ceremonia de los Juegos Olímpicos de Atlanta'96, y ha rodado películas. Pero le cuesta decidir de qué está más orgulloso. «Esa pregunta sí que es difícil. Lo mejor es haber estado en contacto con gente corriente, porque creo que Dios me ha utilizado para hacer un trabajo y yo, con mis errores y mis imperfecciones, me siento humilde para seguir cumpliendo mi cometido: llevar luz a los demás».

«Una mujer fantástica»

Milton Biggham trabajó con Whitney Houston para la película «La mujer del predicador» (en la imagen, 1996), que protagonizó junto a Denzel Washington. Su coro participaba en varias escenas de la cinta. «¡Era una mujer fan-tás-ti-ca!», exclama el reverendo. «Era de una personalidad simplemente eléctrica. Y cantando era magnética», asegura. Parte de ese repertorio lo ejecutarán en España en su homenaje, por su fallecimiento el año pasado. «Di sólo que era una gran mujer», pide Biggham.

- Cuándo: jueves 12 y viernes 13. 20:30 horas.

- Dónde: Teatro Fernán Gómez. Plaza de Colón, 4. Madrid.

- Cuánto: 30 euros.