Rafael Cadenas gana el Premio de Poesía Iberoamericana Reina Sofía

El venezolano, muy crítico con el régimen de Maduro, gana por primera vez para su país el Premio de Poesía Iberoamericana Reina Sofía.

El premio más importante de poesía de las dos orillas atlánticas, el Reina Sofía, ha vuelto a romper su pacto tácito de alternar galardonados españoles con latinoamericanos (ya lo hizo en el período 2011-2012) para premiar, tras la nicaragüense Claribel Alegría, al venezolano Rafael Cadenas. El poeta, de 88 años, ya recibió en 2015, en Granada, el Premio Internacional Federico García Lorca. Para el jurado, presidido por Alfredo Pérez de Armiñán y de la Serna, presidente del Patrimonio Nacional, y Ricardo Rivero Ortega, rector de la Universidad de Salamanca, era justo "reconocer el conjunto de la obra de un autor vivo que por su valor literario constituye una aportación relevante al patrimonio cultural común de Iberoamérica y España".

Ése es Cadenas, el hombre que escribe versos sencillos pero hondos, ante todo humanos: "Vengo de un reino extraño, vengo de una isla iluminada, vengo de los ojos de una mujer". Y de Venezuela, la patria amada que no pasa por su mejor momento. Cadenas militó en su juventud en el Partido Comunista, por lo que sufrió destierro, para descubrir con el tiempo que "lo que pensábamos del comunismo era una mentira". “No pertenezco al linaje de aquellos cuyo pensamiento se mantiene casi invariable durante toda su vida”, asegura un escritor que, por primera vez, lleva el galardón al país caribeño. Su relación con el régimen de Nicolás Maduro no es precisamente complaciente. "Es un régimen que no es democrático, más bien odia la democracia", aseguró en 2017.

Un jurado compuesto por Darío Villanueva Prieto, director de la Real Academia Española; Juan Manuel Bonet Planes, director del Instituto Cervantes; Ana Santos Aramburo, directora de la Biblioteca Nacional de España, junto con poetas como Luis Alberto de Cuenca o Joaquín Pérez Azaústre ha valorado una obra de cerca de 30 libros entre poesía y ensayo y que ha sido galardonada en todo el mundo. "Yo que no he tenido nunca un oficio": así da comienzo "Derrota"(1963), uno de sus poemas más celebrados de un autor que hoy en día es referente cultural y moral de una Venezuela dividida y deprimida.