Sección patrocinada por: sección patrocinada

Tenis

Victoria de Djokovic con mascarilla y gafas en su primer partido en la vuelta del tenis

El número uno, con problemas en el cuello de los que tuvo que ser tratado con todas las medidas de seguridad, superó con apuros y dudas al lituano Berankis en el Masters 1.000 de Cincinnati

Western and Southern Open in USA
El número uno del mundo pidió la entrada del fisioterapeuta para tratarse el cuelloJASON SZENESAgencia EFE

Los tenistas grandes, los grandísimos, lo son porque juegan muy bien en general y porque también juegan bien cuando hay que hacerlo, con presión. Berankis, el lituano número 72 del mundo, jugó muy bien en general, pero, ¡ay en los momentos importantes! Tuvo un break arriba en el primer set ante Novak Djokovic, el número uno, que disputaba su primer partido oficial tras el confinamiento y en esta vuelta del tenos. No supo concretarlo después y ponerse 5-3. Pero tampoco se vino abajo y siguió jugando bien para llegar al “tie break”, donde encadenó un error tras otro para cederlo por 7-2. Pero es que el segundo set lo comenzó con otra ruptura y otro 2-0 que tampoco supo rentabilizar, como sucedió con el 4-2. Demasiadas oportunidades desaprovechadas. Total 7-6 (7/2) y 6-4 para el serbio, que lleva un 2020 con 19 triunfos y ninguna derrota, aunque esta vez dejó muchas dudas...

Lo de jugar bien de Berankis, un tenista que venía con ritmo después de haber ganado tres encuentros ya en Nueva York (la previa y la primera ronda), se demostró en que pudo en muchos peloteos largos e incluso desbordó al jugador que mejor defiende del mundo. Se atrevía al cara a cara y salía victorioso e hizo correr a su rival muchísimo y jugar lejos de la línea de fondo. Las dudas de Djokovic empezaron con las toallas. En este regreso del tenis, los recogepelotas no las tocan y cada vez que había que cambiar de pista se le olvida recogerlas y se tenía que dar un paseo extra. Eso fue una anécdota. Lo preocupante era su cuello. Tenía molestias que le hicieron no disputar el dobles con Krajinovic el domingo. Se reservó para el individual, pero la incomodidad se notaba sobre todo en el saque, cuando tenía que mirar hacia arriba, o en algún remate, golpe que exige una técnica parecida. Empezó el partido con dos dobles faltas seguidas y acumuló un buen puñado más durante el encuentro. Nole hacía gestos para estirar e incluso al acabar el primer set fue atendido por el fisio, momento en el que se pudo ver el protocolo que se ha montado para que el tenis pudiera volver en Nueva York con este Masters 1.000 de Cincinnati y el US Open, que arranca el próximo lunes. El fisioterapeuta entró con mascarilla y gafas y dio el mismo material, nuevo, al serbio, que se rió al recogerlo, se lo puso y sacó el pulgar antes de tumbarse y que le crujieran bien el cuello y las cervicales. Pudo acabar el duelo y ganar el partido pese a todo, aunque si no mejora y descarga la zona, en cualquier gesto puede quedarse tieso. Ahora le espera el estadounidense Sandgren.

La sorpresa de la jornada fue la derrota de Thiem, el número tres del mundo, ante Krajinovic, además de paliza: 6-2 y 6-1. Por su parte, Roberto Bautista Agut venció en su debut ante Gasquet: 7-5 y 6-1. En octavos le espera el duro Khachanov. Y Murray dio un paso adelante al vencer a un “top 10″ por primera vez desde 2017. Pudo con Zverev: 6-3, 3-6 y 7-5. No hay que olvidar que el ex número uno del mundo juega con una prótesis en la cadera.