Messi se hace un homenaje y el Barça derrota al Huesca (4-1) y se acerca al Atlético

Hubo homenaje a Messi antes del partido: el «10» llegaba a los 767 partidos con la camiseta del Barcelona, igualando el registro de Xavi. Le hicieron un vídeo en el que el propio ex centrocampista decía: «La historia sigue, enhorabuena». ¿Un guiño a la continuidad del argentino? También participaron Pedrito, Piqué, Jordi Alba, Sergi Roberto, Deco, Belletti... Compañeros de ahora y de antes que le dedicaban adjetivos: «Irrepetible». «Espectacular». «Leyenda». «El mejor». Empezó el partido y entonces Leo decidió hacerse un autohomenaje, como si fuera a utilizar el partido contra el Huesca como un recopilatorio de grandes éxitos, en el que mostrara todo lo que ha hecho durante esos 767 encuentros. Como por ejemplo, marcar goles con tiros ajustados a la escuadra dando curva al balón y tocándolo con cierta suavidad. Pero también asistiendo a sus compañeros, como el pase medido a la cabeza de Mingueza cuando el encuentro se podía haber complicado para el Barça.

Porque Griezmann decidió, como Messi, que el sitio bueno era la escuadra derecha del portero Álvaro Fernández y allí la puso también con la zurda, con mucha calidad, pero con más violencia, aunque antes del descanso Rafa Mir recortó diferencias en un polémico penalti y con el 2-1 en la segunda parte cualquier cosa podía suceder.

Arrancó con fuerza el conjunto de Koeman, presionando muy arriba, y el gol de Mingueza le volvió a dar el colchón de dos goles que le hizo tener un fin de fiesta tranquilo. El entrenador holandés repitió el equipo de París, con tres centrales y dos carrileros. No era un día para rotar porque el empate del Atlético contra Getafe permitía a los barcelonistas meterse definitivamente en la pelea por la Liga al situarse a cuatro puntos. Además, hasta el próximo domingo no tienen que volver a jugar, el descanso más largo que han tenido desde que empezó este 2021 asfixiante, con dos partidos por semana entre el campeonato de la regularidad, la Copa, la Supercopa, la Champions...

No fue una noche brillante la del Barcelona, pero en la primera parte además de los dos tantos, encontró un larguero de Alba y otro de De Jong, que hasta jugando de central se incorporó. El Huesca todavía pudo volver a la pelea con una opción clarísima que Rafa Mir no convirtió en el 3-2 no se sabe cómo. Dispuso de algunas contras que no llegó a concretar ante un rival en el que reapareció Araujo y que sesteó, aunque Messi tuvo tiempo para lograr el doblete con otro tiro pegadito al palo marca de la casa, el gol que mejor lo define durante todos estos años, quizá el que más veces ha repetido.