Análisis: Cambios sin revolución

- ¿Cómo ha repercutido la derrota en la plantilla?

–El núcleo duro, los internacionales españoles, estaban convencidos de estar ante una oportunidad casi irrepetible para ser campeones de Europa. Minutos después de la derrota, más de uno en el vestuario ya aseguraba que no está dispuesto a retirarse sin ganar la Euroliga. Los aplausos que recibieron los jugadores y el cuerpo técnico cuando entraron en el avión de regreso y la presencia de las familias de la mayoría en el vuelo de vuelta paliaron en parte el disgusto.

- ¿Habrá cambios para buscar la «Novena» la próxima temporada?

–En el club ya se ha asumido que se necesita algo más, el problema es encontrarlo. Que nadie espere una revolución. Habrá cambios, pero no serán sustanciales. Llull, Rudy, Sergio, Carroll, Suárez, Mirotic y Reyes seguirán. El papel de Draper y Slaughter, especialmente el segundo, no ha defraudado y están plenamente integrados en el vestuario. Darden, Pocius y Hettsheimeir tienen los días contados. El caso de Begic es especial. Hay pocos 2,16, por no decir casi ninguno, fichables, pero... La paciencia con él se puede acabar en poco más de un mes. El acuerdo con el pívot del Blusens, Mejri, no significa mucho. El tunecino (2,17 y 26 años) puede convertirse en otro «caso Oleson», que fichó por el Madrid y terminó como moneda de intercambio con el Baskonia.

- ¿Qué hay en el mercado?

–En la sección se considera que fichar a un galáctico tipo Rudy, una operación que rondó los 10 millones de euros, es casi imposible. Un nombre interesante es el de Darko Milicic (20-6-1985, 2,13 y 125 kilos). El irascible pívot serbio, número dos del «draft» de 2003, está pasándose un año sabático después de abandonar la NBA, donde jugó en seis equipos durante diez temporadas. La clave es si ha asentado la cabeza porque lo último que quieren los técnicos es un jugador que contamine el vestuario.