Cara a cara: ¿Debe seguir apostando Zidane por la BBC?

► José Luis Sánchez: Sí, esta versión es innegociable

Querido Alfredo, debido a tus numerosos cambios de opinión ya no sé si te gusta la BBC, la MCN, la NCB, la KGB o la CIA. Pero en tus ratos libres deberías ponerte en bucle el partido en el Santiago Bernabéu ante el Deportivo Alavés. Esa verticalidad, esa conexión entre los tres de arriba es indefendible para cualquier equipo del planeta. Cristiano está en modo depredador, Benzema sacó la chistera y desnudó la defensa rival, y Bale apareció como un diablo por todas partes. Después del resultado de la ida ante el PSG, queda claro que con la BBC enchufada, el camino a Kiev pasa por estos tres futbolistas en el once titular. Así, son INNEGOCIABLES.

Sí, pero en 4-4-2

Sí te aceptaré que Zidane ha dado con la tecla cambiando la disposición táctica. Cristiano ha perdido algo de velocidad desde la banda, y Benzema en las rupturas, por eso ha sido tan inteligente el técnico francés. La BBC sí, pero en 4-4-2. Da igual si quieres poner a Lucas o Asensio en el lado contrario, pero dando consistencia a las alas y ayudas a los laterales. Los tiempos del vértigo con el 4-3-3 han pasado a mejor vida, pero queda mucho por explotar de este tridente que cambió la historia del Real Madrid. Desde su llegada, desde que Bale apareció por el Bernabéu, ha ganado tres de las últimas cuatro Copas de Europa.

Zidane

Duro, ¿sabes cuál ha sido la clave de este resurgir del Madrid? Zidane. Les ha picado en el orgullo. A Bale le ha dado una ración de banquillo y ha respondido. Volvió el Expreso de Gales. A Benzema le había sustituido siempre, con los partidos sin resolver, y ha espabilado. El mago Karim está de vuelta. A los futbolistas extraordinarios hay que mostrarles respeto y tú te has bajado del barco a las primeras de cambio. Los madridistas de bien te han cogido la matrícula, y cuando pidas el billete para subirte en Kiev, ya te lo habrán picado.

► Alfredo Duro: No, hay sitio para todos

Te entiendo José Luis. Porque tienes las mismas ganas que yo de ver nuevamente a la BBC liderando este final de temporada para quitarse de en medio al PSG y acabar llevando al Madrid después hasta la final de Kiev para levantar la decimotercera. Y por eso hay que mantener la cabeza fría. Ahora es cuando hay que admitir que han sido Marco Asensio y Lucas Vázquez los que más han contribuido a la mejora en los números y en el juego del equipo. Han abierto el campo y sacudido, con su acostumbrado descaro, los espectaculares recursos en ataque que han hecho del Madrid campeón de todo.

Agitación

La victoria sobre el PSG, el partido clave para entender la transformación blanca, no se puede entender sin admitir la extraordinaria agitación que ellos provocaron cuando pintaban bastos para el Madrid. Cualquier revisión del dibujo táctico que más le conviene a este equipo pasa por entender que hay sitio para todos. Marcelo volvió a ser imparable sintiéndose cómodo por los espacios que Marco Asensio le generaba y ese es un factor tan determinante como el de la definitiva recuperación de Bale y Benzema, cuya intermitencia no puede salir siempre gratis.

Orgullo

Zidane, que ha visto en primera fila la desesperante caída en el juego que al Madrid le han costado la Liga y la Copa, tiene la obligación de ser más consecuente que nunca con sus «mejores» jugadores. ¿Estás seguro de que, Cristiano al margen, han sido Bale y Benzema los principales responsables en esta mejoría? Yo tampoco, José Luis. El orgullo que debe prevalecer por encima de todo es el de ponerse la camiseta del Madrid y saber que representas a un equipo que ha hecho de la victoria su única ley de vida. Ganar la eliminatoria ante el PSG no es una cuestión de orgullo para unos pocos. Es el orgullo de todos y en eso tampoco hay nada que negociar.