Hamilton y la suerte

Alonso tuvo una gran actuación, llegó a rodar en el sexto lugar, pero una avería en el palier le obligó a abandonar.

El inglés venció por delante de Vettel y Verstappen. Cometió un error táctico en las primeras vueltas, pero una posterior neutralización le permitió mantenerse en la pelea. Sainz arriesgó con la estrategia y acabó en una increíble séptima plaza. Alonso tuvo una gran actuación, llegó a rodar en el sexto lugar, pero una avería en el palier le obligó a abandonar. Es difícil que en la Fórmula 1 existan las segundas oportunidades y excepcionalmente Lewis Hamilton y el equipo Mercedes la encontraron después de cometer una equivocación que pudo costarles muy caro.

Todos los pilotos salieron con el neumático intermedio (llovió por la noche y la pista se estaba secando) mientras que el único que lo hizo con gomas de seco fue Carlos Sainz. Nada más arrancar la prueba la mayoría de pilotos se dieron cuenta de que el asfalto estaba casi seco, que ya no estaba para esa clase de compuesto, sino para el que llevaba Sainz. El madrileño, como era de esperar, empezó muy lento, pero en apenas dos giros la trazada estaba seca, salvo en algunas zonas, y su ritmo empezó a ser muy bueno. Sin embargo, un incidente provocado por Lance Stroll obligó a la dirección de carrera a activar el “Virtual Safety Car”, por lo que todos los coches debieron reducir la velocidad. Esta circunstancia fue aprovechada por la mayoría de pilotos para cambiar sus ruedas intermedias, algo que no hicieron en Mercedes, que se mantuvieron en pista incomprensiblemente cuando el asfalto estaba seco en la mayoría de las curvas.

Hamilton se mantuvo en cabeza y sus rivales de Ferrari apenas perdieron tiempo porque pasaron por boxes aprovechando que el Gran Premio estaba neutralizado. Cuando volvió la carrera, Hamilton llevaba gomas intermedias mientras que sus rivales ya montaban el compuesto adecuado. El fallo táctico se cernía sobre el box de Mercedes, pero pocas vueltas después la suerte estuvo de su lado porque un accidente de Giovinazzi volvió a neutralizar la carrera y, esta vez sí, Hamilton cambió las ruedas para igualarse en estrategia con Vettel, que siempre fue su principal amenaza.

Hamilton no perdió el liderato y en los siguientes giros debió aguantar la presión de los Red Bull y la llegada de Vettel. Sin embargo, poco a poco fue obteniendo una pequeña ventaja y desde ahí administró la distancia sin cometer errores. Desde ese momento marcó el planteamiento de su rival de Ferrari y ambos volvieron a pasar por boxes. Pero esta parada ya no trajo consecuencias. Eso sí, de no ser por la salida a pista de ese segundo safety car las cosas hubieran sido muy diferentes, muy a favor de Vettel. El alemán debió emplearse a fondo para superar a Raikkonen y poco después a Verstappen, que salió en los últimos lugares y fue capaz de alcanzar la tercera plaza de la clasificación.

Peor le fueron las cosas a Bottas, que cometió un error en los primeros giros y desde ahí no acertó en nada más. Acabó sexto con un coche que sólo está en condiciones de ganar y hacer posiciones de podio.

El madrileño Carlos Sainz cruzó la línea de meta en séptima plaza, es decir, el primero fuera de los equipos que dominan el campeonato. El de Toro Rosso sorprendió a todo el mundo por ser el único piloto en parrilla de salida que montó neumáticos de seco frente al resto que se decidieron por los intermedios, por no arriesgar. No arrancó bien como era previsible y poco a poco fue recuperando el terreno perdido (después de sufrir un trompo y tener un pequeño toque contra un muro). Pero esta estrategia le valió para ahorrarse la primera parada “colectiva” que hizo la mayoría aprovechando la salida a pista del coche de seguridad. Esto le consolidó en la séptima plaza y una vez más demostró su inteligencia dentro y fuera de la pista.

Fernando Alonso volvió a hacer posible lo que parece imposible. Con el asfalto es unas condiciones tan difíciles demostró que su nivel de pilotaje está dos puntos por encima del resto. Llegó a rodar en la sexta plaza y hubiera terminado en la zona de puntos de no ser por la rotura del palier en la vuelta 35º. El motor no termina de funcionar bien y de ofrecer el rendimiento que debería, pero lo cierto es que los dos abandonos que ha sufrido ya en 2017 se han debido a fallos mecánicos que poco o nada tienen que ver con Honda.

La Fórmula 1 no para porque el próximo domingo se disputa el Gran Premio de Barein (17.00 h en Movistar+ y Vodafone TV).