Cristiano tiene prisa

Zidane había alargado sus vacaciones, pero él regresó ayer, tres días antes de lo previsto

Zidane quiere que todos sus futbolistas tengan al menos un mes de vacaciones antes de esta temporada con cinco títulos en juego. Por eso le dio a Cristiano vacaciones hasta el día 10, uno después de que el Real Madrid debutara oficialmente en la Supercopa de Europa. Ronaldo no va a viajar hoy a Noruega para enfrentarse al Sevilla mañana, pero sí que está ya entrenando en Valdebebas. Ayer apareció por sorpresa, al menos para los medios, en la ciudad deportiva blanca, porque tiene prisa. Quiere ponerse a punto cuanto antes y perderse cuantos menos partidos mejor.

Cuando tuvo que abandonar lesionado la final de la Eurocopa y se le diagnosticó un esguince de ligamento en la rodilla izquierda algunos pensaron que se empeñaría en volver en Trondheim, pero además de que era imposible, Zidane no se lo iba a permitir. Quiere a sus estrellas enteras para la parte final del curso y eso incluye también a Benzema y Bale, dos de las dudas que maneja el francés para el choque ante el Sevilla. El delantero ha trabajado al margen durante todo el verano y no ha podido estrenarse en los partidos de preparación. Sus molestias en la cadera no le van a permitir saber hasta última hora si podrá jugar algunos minutos mañana.

El caso del galés es distinto, porque en un principio estaba tan descartado para el primer partido oficial del año como Cristiano, Kroos y Pepe, que sigue de vacaciones, pero la gran forma física en la que regresó el sábado al trabajo han hecho dudar al cuerpo técnico. Bale acabó acalambrado la final de la Liga de Campeones y se desfondó para llevar a su país a las semifinales de la Eurocopa de Francia. Demasiado para un futbolista al que su físico le traiciona de vez en cuando, pero que se ha cuidado durante el verano y ha vuelto pletórico. Tanto, que con sólo tres sesiones de trabajo podría entrar en la convocatoria para la Supercopa, algo que hoy podrá confirmar o descartar Zidane en la conferencia de prensa previa ya en Noruega.

Más allá de Benzema y Bale, Zizou tiene más que claro el equipo que se jugará el primer título. La defensa será casi de gala con Carvajal, Marcelo, Varane y Sergio Ramos, mientras que Modric y Casemiro serán fijos junto a Isco en el centro del campo. Si llegara Bale podrían caerse Lucas Vázquez o James, aunque lo lógico es que jueguen ambos de inicio y el galés sea el recambio.