Rayo Vallecano

Neymar tumba al Rayo

El delantero del Rayo Vallecano Javi Guerra (d) celebra junto a Llorente tras marcar ante el FC Barcelona.
El delantero del Rayo Vallecano Javi Guerra (d) celebra junto a Llorente tras marcar ante el FC Barcelona.larazon

Le hicieron tres penaltis, le pitaron dos y marcó ambos; pero los de Paco Jémez se adelantaron en el marcador y dieron la cara.

No es éste el mejor Barcelona, ni por aproximación; pero es el Barcelona, gruyere. No están Messi ni Iniesta, pero es el Barça, y el Rayo es el Rayo, un equipo atrevido, descarado, sin complejos y con más fugas que Alcatraz. A Paco Jémez se le evade cada temporada docena y media de efectivos. Felipe Miñambres le trae los recambios y él los acopla, poco a poco, cuando le dejan las lesiones y el periodo de aclimatación. A estos inconvenientes añade la lógica más aplastante: que el Rayo no es el Barcelona, y que en sus filas no juega, entre otros, Neymar, el jugador que desequilibra, que decide los partidos, y éste lo decidió.

Neymar se escribe con N, alguno con mala uva dirá que con H de Hacienda, mas es seguro que por lo visto en este encuentro empieza por P de pesadilla, y de penalti. A falta de Messi, el brasileño adquiere presencia, prestancia e importancia vital. Después de que Toño empezara a protagonizar el partido de su vida, al ganar sendos mano a mano a Rakitic y a Luis Suárez; después de que Piqué se quedara enganchado y propiciara el gol de Javi Guerra a centro de Bebé, “Ney” intentó por enésima vez la incursión en el área y Llorente le zancadilleó. Penalti. Trashorras le sopló al oído por donde iba a tirar el brasileño. Justo al otro lado de donde se lanzó. Empate a uno.

El Barcelona merecía el empate, porque llegaba más, y el Rayo necesitaba espabilar porque los delanteros azulgrana le llegaban muy sueltos. Y otra vez Neymar pisando el área. Nacho también hizo penalti y él lo lanzó al otro lado. Con 2-1 y después de que Toño desviara a córner una ocasión de Sergi Roberto, Nacho volvió a cometer pena máxima sobre la pesadilla carioca y el árbitro no la señaló. O le pareció excesivo un tercer penalti o no lo vio, que es lo probable.

En la reanudación no hubo nada que amilanara al Rayo: ni el Camp Nou ni el resultado ni el rival. Entró decidido a ganar el partido y en dos minutos rozó la gesta; pero Bravo emuló a Toño y despejó sendos uno contra uno, a Javi Guerra y a Ebert, cuando de nuevo Bebé hacía diabluras entre la defensa local. Si Lass fuera Neymar, el Rayo habría podido ganar; pero el guineano no es el brasileño, ni Javi Guerra tampoco. Lass tiene más desparpajo y más velocidad que temple, es un buen futbolista, pero no un crack. Neymar sí lo es. No está Messi y él asume el rol. Provoca penaltis, los transforma y acompaña siempre la jugada. Por eso, cuando mejor estaba el equipo de Jémez, cuando podía haber empatado e incluso ganado, apareció «Ney» y reventó las ilusiones vallecanas en un minuto. Hizo el 3-1 en el 69 y en el 70, el 4-1. Estaba allí, al tanto de los despejes de Toño o de que le cayera algún balón suelto. Él ganó el partido y desquició al entrenador rayista, que se quejaba amargamente en el banquillo de una derrota demasiado abultada, pero producto de los errores de sus jugadores y de los grandes aciertos del héroe Neymar, que dio el quinto a Suárez. El segundo de Javi Guerra, triste consuelo.

- Ficha del partido:

5. Barcelona: Bravo; Alves (Douglas, min.77), Piqué, Mathieu, Jordi Alba; Busquets (Gumbau, min.75), Rakitic, Sergi Roberto; Sandro (Munir, min.55), Luis Suárez y Neymar.

2. Rayo Vallecano: Toño; Nacho (Dorado, min.46), Zé Castro, Llorente, Rat; Lass, Trashorras; Ebert, Jozabed, Bebé; y Javi Guerra.

Goles: 0-1, min.15: Javi Guerra. 1-1, min.22: Neymar (p). 2-1, min.32: Neymar (p). 3-1, min.69: Neymar. 4-1 min.69: Neymar. 5-1, min.76: Suárez. 5-2, min.86: Jozaned.

Árbitro: Pedro Jesús Pérez Montero (Comité andaluz). Mostró amarilla a Llorente (min.21), Dorado (min.48) y Piqué (min.79).

Incidencias: partido correspondiente a la octava jornada de la Liga, disputado en el Camp Nou ante 75.472 aficionados, según datos facilitados por el club azulgrana.

Antes del arranque del choque, el equipo de hockey patines de la sección del FC Barcelona, presentó la Copa Intercontinental, ganada horas antes en el Palau Blaugrana.