Real Madrid
La mano que mece...
Madrid- Mourinho volvió a tener el gran acierto del buen estratega. Del técnico que cuando ve que las cosas no van bien, reacciona rápido, mueve el banquillo y sigue retocando al equipo, pese a que agote los tres cambios prematuramente. Como en Old Trafford, ayer sus cambios fueron vitales. Él es la mano que mece este Real Madrid, de sus cruciales cuidados a las distintas generaciones que cría en esa cuna y sus decisiones, depende cómo se mueva el Madrid. Al descanso, Mourinho desbarató su idea de prescindir de Özil, Xabi Alonso y Khedira, y echó mano de los dos primeros más Benzema para dotar al once de mayor creatividad. A partir de ahí, llegaron los goles. Arbeloa, como en Old Trafford, fue el primer sacrificado. Un defensa menos para incorporar a un atacante más.
Y cayeron cuatro, tres en cinco minutos, el último en las postrimerías del partido. Marcó por partida doble quien más lo necesitaba, Higuaín; su falta de gol comenzaba a ser preocupante. Como la de Benzema, que también logró un tanto. La alternancia de ambos nueves –dice el argentino– «es por el bien del equipo». «Estoy contento, pude marcar, di un pase y ganamos. La idea es presionar al Barça para que no se relaje», añadió.