Un aperitivo con Gameiro

Tres goles en cuatro minutos, entre el 81 y el 85, del delantero francés Kevin Gameiro desequilibraron el partido entre el Atlético de MÁdrid y el Sporting de Gijón en El Molinón y dieron la victoria al conjunto madrileño.

Cinco minutos para la gloria de Gameiro. Suficiente tiempo para marcar tres goles, desatascar al Atlético y firmar el triunfo de los rojiblancos en El Molinón, un campo que, hasta ayer, no se le había dado muy bien a Simeone, en un partido en que la ilusión y el buen juego del Sporting claudicaron ante la ley de la pegada. Así de cruel es este juego, porque los de Rubi habían tenido a raya a los madrileños y no esperaban –casi nadie la esperaba– la explosión de Kevin Gameiro, que salió del banquillo para reivindicarse como goleador.

El Atlético andaba dubitativo. Había marcado un gol nada más comenzar el segundo tiempo, pero el empate de Sergio Álvarez le devolvió a las dudas y los miedos del primer tiempo porque el centro del campo –la llamada sala de máquinas– estaba desajustada. Nadie engrasaba aquello, pese a los esfuerzos de Koke, y Simeone tiró de manual de entrenador. Había sido osado con Correa de titular, pero al ver el buen nivel de Sergio Álvarez, Vesga y Moi Gómez, optó por la baza de Saúl y minutos después por Thomas. A la par que Saúl entró Gameiro por un esforzado y poco atinado Fernando Torres en su cuarto día como titular.

Y pleno. El fútbol es tan caprichoso que, al igual que sucedió el pasado domingo ante el Celta, el Atlético fue un torbellino en el último cuarto de hora. A los vigueses les ganó en el alambre y al Sporting en los cinco minutos de inspiración de Gameiro –fichado para hacer goles, pero que lleva un curso bastante irregular y no se asemeja al del Sevilla–, que aprovechó su velocidad, un pase genial de Griezmann y los despistes de Amorebieta y Meré para desnudar a Cuéllar con sus tres tantos. Goleada a la vista por obra y gracia de un protagonista que no estaba en el guión. Ayer, el papel de Gameiro era de secundario y, sin embargo, se llevó la estatuilla del mejor jugador del partido.

Su primer gol (min 80) tuvo en Griezmann a un asistente de lujo. Funcionó la conexión francesa y el pase recordó a los mejores de Laudrup, de primera, con el exterior y casi mirando al tendido. En el segundo, un minuto después, la colaboración de Thomas fue clave tras el error en el pase de Meré. Gameiro corrió y cruzó lejos de Cuéllar. Y el tercero (min 85) fue un balón largo a la espalda de los centrales, en donde aprovechó su velocidad para plantarse solo ante el portero, levantar la cabeza y rematar con certeza.

Rubi se llevaba las manos a la cabeza. Simeone aplaudía y comentaba con el banquillo lo ocurrido. En cinco minutos todo había cambiado. Gameiro había matado al Sporting en su mejor versión como goleador y el Atlético se olvidaba de las penurias de su juego, de su falta de equilibrio y de su inferioridad para celebrar un triunfo del que sale reforzado el delantero francés, pero que sigue creando dudas cuando dentro de dos días espera el Bayer Leverkusen.

Porque el Atlético no salió con la intensidad que exige su técnico. Griezmann y Correa fueron los que más cerca estuvieron del gol, con sendos remates, pero fue el Sporting el que manejó el partido. Traoré no está para la NBA y quizá, tampoco, para un equipo de campanillas. Fue compañero de Carrasco en el Mónaco y su altura obligó a Savic y Lucas a estirar las orejas para pelearse con él en los balones aéreos. Sus dejadas, sus saltos y sus movimientos creaban desazón en los zagueros rojiblancos. Burgui desde la izquierda y Douglas desde la derecha le ponían balones. Además, Sergio Álvarez y Moi Gómez le buscaban. Tuvo un par de oportunidades para marcar y fue una pequeña pesadilla en un Sporting que mezcla el buen juego con la inocencia.

En el descanso, tras los goles de Carrasco y Sergio Álvarez, nadie pensaba en Gameiro. El partido estaba más inclinado del lado del Sporting que de un vulgar Atlético, pero Simeone se agarró al francés y éste respondió con tres goles. Tres zarpazos a la hora del aperitivo para que el Atlético afronte con garantías la semana grande.

1.- Sporting: Cuéllar, Lillo, Jorge Meré, Amorebieta, Canella, Sergio Álvarez, Mikel Vesga (Cop, m 83), Moi Gómez, Douglas, Traoré (Carlos Castro, m 75) y Burgui (Víctor, m 83)

4.- Atlético de Madrid: Moya, Vrsaljko, Savic, Lucas, Filipe Luis, Gabi, Koke, Correa (Gameiro, m 61), Griezmann, Torres (Saúl, m 61) y Carrasco (Thomas, m 67)

Goles: 0-1 Carrasco (m 46), 1-1 Sergio Álvarez (m 48). 1-2 Gameiro (m 80), 1-3 Gameiro (m 81), 1-4 Gameiro (m 85)

Árbitro: González González. Mostró tarjetas amarillas a Douglas (m 56), Thomas (m 71)

Incidencias: 24.480 espectadores.