Baloncesto

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La voz reivindicativa de la selección: Laia Palau

[con la capitana de la selección femenina de baloncesto,Laia Palau (d), este lunes durante la recepción]
[con la capitana de la selección femenina de baloncesto,Laia Palau (d), este lunes durante la recepción]larazon

«Sí señor, sí señor, somos la revolución ...», dice una de las estrofas más famosas del Vals del Obrero. No hay mejor canción que la de Ska-P, que ya es todo un clásico en los éxitos de la selección española de baloncesto, que represente el momento que está atravesando el deporte femenino español.

«Este grupo es ambición pura. Los valores del deporte están muy reflejados en este equipo», dijo a su llegada a España la base y capitana de la selección de baloncesto, Laia Palau. El domingo, en Belgrado, las chicas de Lucas Mondelo se colgaron la medalla de campeonas de Europa. Un título que ya consiguieron en 2017 y que han logrado revalidar este verano. No tuvieron la misma suerte que ellas las chicas de Jorge Vilda, que en octavos de final se despidieron de la Copa del Mundo de Francia ante la todopoderosa selección de las barras y las estrellas. No obstante y pese a esa derrota, el fútbol femenino español vaticina un futuro esperanzador y es que en el Mundial de la reivindicación, España ha presentado sus credenciales.

Como sucediera hace dos semanas con las chicas de fútbol, ayer el aeropuerto de Barajas volvió a llenarse de medios de comunicación para recibir a las reinas de Europa. «Es una cosa irrepetible, hacía muchísimo que no pasaba. Creo que esta selección sigue siendo de leyenda. Con el tiempo valoraremos lo que este equipo está haciendo y de la manera que lo está haciendo», señaló Laia Palau. La capitana y jugadora más veterana del combinado nacional con 39 años, es la voz más reivindicativa del vestuario. No se achanta ante las críticas y por eso no se corta cuando le preguntan si el baloncesto por fin, tiene ese reconocimiento que se merece. «Volvemos a ganar un oro, si no lo reconocemos es un problema que tenemos entre todos. Estamos muy contentas de que estéis aquí. Esperemos seguir dandos motivos para que volváis a hablar de nosotras, pero nosotras estamos haciendo nuestro trabajo hace mucho tiempo», indicó con una media sonrisa la base española.

Tras el baño de masas en el aeropuerto, tocaba visita institucional y, en el Palacio de la Moncloa, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez las recibió con los brazos abiertos. «Es muy difícil trasladaros la emoción y el orgullo que siente todo el conjunto de la sociedad española. Sois un ejemplo de empeño, sacrificio y compañerismo que destiláis al jugar y, sobre todo, fuera de la cancha», destacó Pedro Sánchez. «Estoy convencido de que nunca vamos a dejar de creer en vosotras y que de (los Juegos Olímpicos) Tokio vendréis con las mejores de las noticias», añadió el presidente en funciones.

En Belgrado, no sólo ha habido un antes y un después con el triunfo de España por segunda vez consecutiva, hazaña que ha tardado 28 años en repetirse, sino que la victoria de la selección demuestra cómo están cambiando las cosas en el deporte femenino. «Apostar por nosotras demuestra que a lo mejor están cambiando algunas cosas. Hoy hemos sido portada en casi todos los periódicos en España. Estamos muy orgullosas de pertenecer a este equipo. No dejéis de creer en nosotras, porque ya podéis ver que fallamos poco», señaló Laia, que no dudó en reconocer que la de baloncesto, es la mejor selección de la historia. «Femenino seguro. En masculino, no puedo entrar», dijo. Al deporte femenino español ya no hay quien lo pare. No deja de romper barreras y las chicas del «basket», a lo suyo, haciendo historia porque... «Sí señor, sí señor, somos la revolución».