Fútbol

Argentina

«No» de Boca y River

Los dos clubes han recurrido por diferentes motivos a la decisión de la Conmebol. Nadie en Argentina quiere que se juegue fuera

Boca y River no quieren venir a jugar a Madrid por diferentes motivos. Sus hinchas abogan por que se dispute allí
Boca y River no quieren venir a jugar a Madrid por diferentes motivos. Sus hinchas abogan por que se dispute allílarazon

Los dos clubes han recurrido por diferentes motivos a la decisión de la Conmebol. Nadie en Argentina quiere que se juegue fuera..

Todos los preparativos se están acelerando para que la final se dispute en el Bernabéu, mientras que en Argentina y en los países suramericanos la indignación va en aumento desde que el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, al que Maradona llamó «hijo de puta», anunció que el River-Boca se disputaría en territorio español. «Ya no es la Copa Libertadores es la Copa de los conquistadores» llegan a comentar los más radicales. Y es que no hay ningún amante del fútbol, al otro lado del Atlántico, al que le parezca bien que el partido se dispute en la capital de España.

Los dos clubes se han pronunciado en contra y su «no» es rotundo aunque los motivos son diferentes. El Boca siempre se ha negado a jugar. Basándose en lo que ocurrió –apedreamiento del autobús y lanzamiento de gas pimienta que dañó a los jugadores y le ocasionó un problema en un ojo a Pablo Pérez–siempre ha querido que se le diera el partido por ganado. Por eso recurrió a la Conmebol, que falló en su contra.

Y por eso el club anunció que va a contratar a un prestigioso bufete de abogados –Ruiz&Del Valle–, especialista en derecho deportivo para que se encarguen de las « apelaciones tanto ante la Cámara de Apelaciones de Conmebol como eventualmente ante el Tribunal Arbitral del Deporte», según anunció el club en un comunicado. Boca insiste en su decisión de «agotar todas las vías y recursos tendientes a que se haga justicia».

Los argumentos de River también tienen como punto de mira la apelación al fallo de la Conmebol por considerar que han salido perjudicados. Pierden la condición de locales por hechos no imputables a la entidad. El club insiste en que fallaron las medidas de seguridad en las afueras del estadio, cosa no achacables a ellos como reconocieron las propias autoridades de Buenos Aires.

Para River, además supone un agravio comparativo con Boca que se juegue en otro estadio y con público de ambos clubes ya que se rompe la igualdad de condiciones que esgrimió la directiva boquense para conseguir que se aplazará el partido del domingo.