Ferrer y Robredo avanzan en Cincinnati y Verdasco y Bautista se despiden

Los tenista españoles David Ferrer y Tommy Robredo avanzaron a la tercera ronda del Masters 1.000 de Cincinnati tras superar al alemán Philipp Kohlschreiber y al estadounidense Sam Querrey.

Los tenista españoles David Ferrer y Tommy Robredo avanzaron a la tercera ronda del Masters 1.000 de Cincinnati tras superar al alemán Philipp Kohlschreiber y al estadounidense Sam Querrey, algo que no pudieron lograr sus compatriotas Fernando Verdasco y Roberto Bautista, derrotados por el croata Marin Cilic y el francés Gael Monfils, mientras que el suizo Roger Federer añadió un nuevo capítulo a su libro de hazañas.

'Ferru' tuvo que sudar y alargar las dosis de combate que ya mostró en Canadá no haber olvidado a pesar de encontrarse en una temporada irregular. El de Jávea dejó atrás la segunda ronda del séptimo Masters 1.000 de la temporada después de casi tres horas de partido y teniendo que salvar dos bolas de encuentro en el segundo set. Sin duda, la versión gladiadora del español salió a relucir una vez más.

El tenista de la 'Armada' no arrancó bien su primer partido en tierras yanquis, ya que perdió su saque en el primer juego. Con el duelo igualado, Ferrer logró recuperar su saque en el octavo juego y el parcial llegó a una muerte súbita en la que se impuso Kohlschreiber. De nuevo en el segundo set, el alicantino comenzó complicándose sus opciones cediendo el servicio a las primeras de cambio.

'Ferru' recuperó su saque en el noveno juego pero antes de llegar al 'tie-break', el español tuvo que salvar un 15-40, con el alemán acariciando ya el triunfo. El favorito número seis en Cincinnati salvó dos bolas de partido en contra y después se impuso en la muerte súbita. A pesar del golpe, Kohlschreiber se mantuvo en la pelea y no tiro la toalla, llegando a salvar entonces él una bola de encuentro para llegar al tercer 'tie-break'. Ferrer culminó ahí una espectacular victoria que le cita ahora con el ruso Mikhail Youzhny.

Por contra, Robredo consiguió una fácil victoria ante el local Sam Querrey. El tenista catalán encarriló rápidamente el partido después de hacerse con la primera manga por 6-2 en apenas 25 minutos. Y pudo cerrarlo aún antes si con 4-1 en el marcador no se hubiera relajado, concediendo una rotura al estadounidense.

En la segunda manga, el tenista español acabó por sentenciar el partido gracias a un tempranero 'break' que defendió hasta la finalización del partido. En la siguiente ronda, Robredo se verá las caras con el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic.

Por su parte, el madrileño Fernando Verdasco sucumbió (7-6(6), 7-6(5)) en un apretado encuentro ante el croata Marin Cilic. El verdugo de Feliciano López en primera ronda se cobró otra 'víctima' española en un encuentro con alternativas para ambos, pero que se decidió en favor del croata en sendos 'tie-breaks'.

También se despidió del Masters 1.000 estadounidense Roberto Bautista, que no pudo hacer nada ante el francés Gael Monfils, que le derrotó por 6-4, 6-1 en menos de una hora. El castellonense, decimotercer cabeza de serie, no pudo con la fortaleza en el servicio de su rival, que tan sólo cedió una bola de rotura y que sólo perdió once puntos con su saque.
FEDERER, 300 VICTORIAS EN MASTERS 1.000.

El galo se medirá ahora con uno de los protagonistas de esta jornada de miércoles, el suizo Roger Federer que dejó un nuevo récord en su carrera. El de Basilea se impuso (7-6(4), 5-7, 6-2) al canadiense Vasek Pospisil para debutar con victoria en su camino hacia un sexto título en Cincinnati. Catorce años después de su primera victoria en un Masters 1.000 (en Miami), el de Basilea sumó la 300, el primero que llega a esa cifra redonda.

Federer, que se quedó sin alcanzar ese número el pasado domingo cayendo en la final de Toronto ante el francés Jo-Wilfried Tsonga, tuvo que trabajar la victoria ante un Pospisil que plantó cara hasta donde pudo. Después de que el suizo se llevase el primer set, el americano respondió empatando el encuentro en el segundo, también igualado. Sin embargo, en el tercer parcial, Federer marcó las diferencias.