Paro

¿Cómo me apunto al paro si me han despedido por el coronavirus?

El trámite se complica ante la falta de atención al público y el colapso de los servicios telefónicos

Economía/Paro.- Asempleo destaca los mejores datos de la década en hostelería y construcción pese al contexto "adverso"
El proceso de puede alargar más de lo deseado si aún no dispone del certificado digital o de una clave de accesolarazonEUROPA PRESS

La avalancha de despidos se ha transformado en una avalancha de solicitudes para acceder al paro. El estado de alarma y el confinamiento se han cobrado miles de puestos de trabajo y los afectados no lo están teniendo fácil para acceder a las prestaciones que les corresponden. Las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) han suprimido su atención al público, al igual que las de la Seguridad Social. Para realizar cualquier tipo de trámite, recomiendan recurrir a su sede electrónica y, para más dudas, los usuarios también pueden hacer uso de los teléfonos que aparecen al acceder a la web de SEPE. Sin embargo, estas medidas de refuerzo han sido en vano. La atención telefónica colapsó y los números de contacto ofrecidos estuvieron inoperativos toda la mañana de ayer. Uno de los principales problemas a resolver es la demora que puede sufrir el proceso de solicitud si aún no dispone del certificado digital o de una clave de acceso. La única manera de solucionar este entuerto es aumentar la carga de trabajo de los empleados de Correos y, por lo tanto, su exposición al Covid-19.

Registro inicial

Los afectados que quieran registrarse por primera vez en el SEPE no podrán hacerlo pidiendo su certificado digital. Esta ya no se encuentra entre las opciones disponibles, ya que para hacerlo, primero es necesario solicitar un número de identificación en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, para acudir más tarde a una oficina de la Tesorería General de la Seguridad Social. De forma presencial, el código sería validado y podría descargar su certificado. No obstante, sus puertas ya no están abiertas al público y al llamar a su teléfono de atención avisan que “el certificado no se puede solicitar. Hay que esperar a que la situación se normalice”. Descartado este camino para acceder a la prestación del paro, los recién despedidos aún tienen una alternativa: registrarse con su DNI y una clave. De nuevo, con esta opción el proceso se dilatará aún más en el tiempo. Al acceder a la pestaña “Registrarse en Cl@ave” del portal “Registro Cl@ave”, el usuario tendrá que aportar su DNI y, a continuación, hacer clic sobre el botón “Si, envíenme una carta de invitación a mi domicilio fiscal”. La carta será enviada a través de correo postal, lo que supondrá un incremento de la carga de trabajo de la plantilla de Correos. Tras recibir la carta, deberá volver al registro e introducir el código de verificación recibido y terminar de completar sus datos.

Solicitud

Una vez sorteadas estas piedras en el camino, podrá comenzar la solicitud de la prestación del paro. En la sede online de SEPE tendrá que dirigirse a la pantalla de “Procedimientos y servicio”, pinchar en “Personas” e, inmediatamente después, "Solicite su prestación”, seguido de “Acceso a solicitudes” y, finalmente, “Solicitud de prestación contributiva”. Llegado a este punto, podrá hacer hacer uso de la identificación que le habrá costado varios días conseguir. Una vez rellenados todos sus datos personales, también será necesario adjuntar el DNI y libro de familia; un certificado de la empresa en la que haya trabajado durante los últimos seis meses, firmado y sellado, y la última renta si la entidad gestora lo pide. Para finiquitar el proceso de una vez por todas, solo quedará introducir un código que llegará a su teléfono móvil.

La ausencia de un servicio de atención telefónica eficiente ha desencadenado una oleada de quejas por parte de usuarios que se ven sin respuestas y con la cartera vacía. Para los que simplemente tengan que sellar la cartilla, los Servicios Públicos de Empleo procederán a renovar de oficio todas las demandas de empleo a la fecha de su vencimiento, con objeto de facilitar el posterior reconocimiento de la prestación por desempleo que corresponda.