Bankia

Bankia, del rescate a la rentabilidad en cinco años

Bankia, del rescate a la rentabilidad en cinco años
Bankia, del rescate a la rentabilidad en cinco añoslarazon

Ha pasado de unas pérdidas de más de 19.000 millones de euros a ser la entidad más rentable, eficiente y solvente entre los grandes bancos españoles.

Esta misma semana se cumplieron cinco años desde que el Grupo BFA-Bankia presentó su primer Plan Estratégico. El 28 de noviembre de 2012, la entidad financiera dio a conocer las líneas estratégicas de actuación en el periodo 2012-2015 después de recibir la aprobación por parte de las autoridades europeas a su Plan de Reestructuración.

Se trataba de unos objetivos muy ambiciosos que se debían conseguir en un periodo complejo, marcado por un contexto macroeconómico muy complicado. Para alcanzarlos, la entidad tuvo que tomar en este periodo decisiones difíciles y, en ocasiones, tal y como las calificó el presidente de la entidad financiera, José Ignacio Goirigolzarri, «dolorosas». Pese a la dureza, la entidad consiguió salir airosa. Y es que apenas tres años más tarde de aquella presentación, el 1 de febrero de 2016, el Grupo BFA-Bankia daba por concluido su plan estratégico habiendo cumplido con creces con el reto que se había planteado al inicio del mismo: ser un banco más solvente, más rentable y más eficiente.

Cambio radical

En tan sólo tres ejercicios, Bankia pasó del rescate –que ascendió a casi 22.5000 millones de euros– a convertirse en la entidad financiera más rentable de nuestro país, un camino en el que Bankia quiere seguir avanzando, para lo cual elaboró el Plan Estratégico 2016-2018, cuyo objetivo es, precisamente, profundizar en los ejes que ya diseñó el primer plan. En un lustro, Bankia ha logrado transformar unas pérdidas en 2012 de 19.056 millones de euros en un beneficio de 739 millones en el tercer trimestre de 2017. La rentabilidad se situó, a septiembre de 2017, en un 8,10%, frente al 5,61% de diciembre de 2013. Por su parte, la solvencia se ha incrementado en casi 11 puntos básicos, pasando del 4,94% al 15, 81%, mientras que el ratio de eficiencia ha pasado del 55,70% al 48% –esta magnitud mide parte de los ingresos que consumen los costes, por lo que es mejor cuanto más baja–. Asimismo, ha reducido su red de oficinas en un 44%, mientras que el número de empleados se ha reducido en un 32% hasta alcanzar los 13.472 profesionales con los que contaba a mes de septiembre de este año.

«En el ánimo del equipo de Bankia ha primado, desde la presentación de su primer plan estratégico, el propósito de generar el máximo valor para los accionistas y para el resto de grupos con los que se relaciona. Sabemos que sólo de esta forma conseguiremos devolver las ayudas y la confianza que recibimos de todos los contribuyentes. De toda la sociedad», asegura Goirigolzarri.

Y es que el trabajo realizado por Bankia en este periodo de tiempo ha permitido avanzar en el proceso de devolución de ayudas. Hasta el momento, la entidad ha generado para el Estado un total de 1.838 millones de euros en una operación de desinversión y en la distribución de dividendos con cargo a sus beneficios. Asimismo, ha devuelto 5.000 millones de euros a preferentistas y accionistas minoritarios que acudieron a la salida a Bolsa del banco. «Cada uno de los aniversarios, que en Bankia celebramos con orgullo por la transformación que ha supuesto para el banco, se vuelve a poner en el debate público la cuestión de la devolución de ayudas de la banca. O, dicho de otra forma, si con la visión de hoy todavía sigue estando justificado el rescate financiero que necesitaron algunas entidades españolas. Muchos han cuestionado –y lo siguen haciendo– que las ayudas fueron dirigidas a salvar a los banqueros, a los accionistas y a los empleados del banco. Sin embargo, el plan de rescate de Bankia se diseñó con el único y legítimo propósito de salvar a las personas. A los depositantes del banco que, como todo el mundo sabe, tienen un seguro sobre los primeros 100.000 euros depositados en cualquier banco, bajo el sistema de protección del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). Si Bankia no hubiera sido rescatada, este fondo habría tenido que hacer frente a 60.580 millones de euros de los depositantes de la entidad, cantidad que supone prácticamente el triple del dinero público que efectivamente se inyectó en Bankia», explicó Gorigolzarri. Hoy, la capitalización bursátil de Bankia asciende a más de 11.500 millones de euros, de los que alrededor de 7.700 millones siguen aún estando en manos del Estado.

El más caro de España

El 26 de mayo de 2012, Bankia protagonizó el rescate más caro de la historia de España: 22.424 millones de euros en ayudas públicas. José Ignacio Goirigolzarri apareció ante los medios en pleno sábado para anunciar que había que reformular las cuentas e inyectar 19.000 millones de euros en Bankia –además de los 4.465 millones ya entregados a su matriz BFA–. Sólo 17 días antes, el Gobierno de Mariano Rajoy había anunciado su nacionalización.