Competencia suaviza el hachazo a las energéticas en más de 1.500 millones

Paso atrás de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en su recorte a la retribución de las energéticas. La amenaza de una batalla legal con imprevisibles consecuencias, las alegaciones presentadas y la intermediación del Ministerio para la Transición Ecológica, que no ocultó en ningún momento sus discrepancias con el regulador –al que culpaba de haber invadido parte de sus competencias– ha hecho reflexionar a la entidad que preside José María Marín Quemada, que ha revisado a la baja su «hachazo» al sector eléctrico y gasista, para dejarlo en más de 1.500 millones, un recorte del 34% respecto al planteamiento inicial. Esto supone dejar casi en la mitad el tijeretazo planteado en julio a la remuneración que reciben instalaciones eléctricas, gasoductos y plantas de regasificación, es decir, que de 4.450 millones de euros se ha quedado en 2.940 milllones. El regulador ha justificado esta decisión tras haber considerado las «alegaciones presentadas por todas las partes implicadas». Así, el sector eléctrico y gasista podrá afrontar en mejor posición los malos resultados que sufrieron sus compañías en bolsa tras el anuncio de la CNMC el pasado verano. Según la circular remitida, Endesa e Iberdrola verían mermada su distribución eléctrica en términos globales en 1.571 millones de euros para el periodo 2020-2025, una mejora de 754 millones con respecto a los 2.325 millones de julio. Un 4,7%, frente al 7% planteado inicialmente. En cuanto a Enagás, por su retribución por el transporte de gas y regasificación del periodo 2021-2026, el regulador ha recalibrado su recorte en un 10,5%, desde el 21,8% inicial, o lo que es lo mismo, de los más 1.400 millones de euros de su primera comunicación a los menos de 700 millones ahora. Por último, Red Eléctrica también ha mejorado su ratio retributivo en el caso del transporte de energía eléctrica. Hasta 2026, el regulador ha recortado un punto el tijeretazo anterior, hasta situarlo en el 7,2%, pasando de los 672 millones a casi 100 millones menos en la actualidad. Los recortes regulatorios se han realizado sobre las redes de transporte eléctrico, que afectan esencialmente a Red Eléctrica –con participación del 20% del Estado a través de la Sepi–, y sobre las de transporte de gas y las plantas de regasificación, que afectan a Enagás –en la que el Estado tiene un 5%–, a Reganosa –con accionariado de la Xunta de Galicia– , y a BBG –donde está presente el Gobierno vasco–.El «hachazo» total que amenazaba a todo sector con la propuesta de marco retributivo que puso sobre la mesa el regulador en julio superaba los 6.000 millones de euros, que con esta corrección se verá ampliamente reducido. La CNMC ha emitido ya diez estas circulares –paso anterior a su definitiva aprobación antes de que concluya el año–. Pero será el Consejo de Estado el que defina la nueva regulación para todo el sector energético. El regulador tiene todavía que abordar otras cuatro circulares: la que afecta a la distribución de gas natural de Naturgy, la de Madrileña Red de Gas, la de Nortegás, la de Redexis o la de Gas Extremadura. La resolución que se tome decidirá el futuro de muchas de sus inversiones, congeladas hasta saber a qué atenerse.