Banco Santander

Domiciliar la nómina o tener 29.800 euros de media, único modo de evitar las comisiones bancarias

Domiciliar la nómina o tener 29.800 euros de media, único modo de evitar las comisiones bancarias
Domiciliar la nómina o tener 29.800 euros de media, único modo de evitar las comisiones bancariaslarazon

La mayoría de las entidades financieras exige que sus clientes mantengan un saldo medio de 29.777,89 euros en su cuenta corriente para evitar, o al menos reducir, las comisiones de mantenimiento que tienen que pagar por mantenerla operativa. De media, la banca cobra 43,99 euros por este concepto, según un informe realizado por Kelisto.es (www.kelisto.es), la web del ahorro, que analiza las cuentas corrientes de los 15 mayores bancos del país.

Desde el inicio de la crisis, la comisión por mantenimiento de las cuentas corrientes ha aumentado un 19,9%, al pasar de los 36,68 euros de 2007 a los 43,99 euros1 que, de media, se aplican en la actualidad. Ahora bien, hay entidades que superan ampliamente la media, como Banco Sabadell (60 euros, un 36,4% más) o Catalunya Caixa (54 euros, un 22,8% más). En el extremo contrario se sitúan Kutxabank (19 euros, un 56,8% menos) y Caja España-Duero (36 euros, un 18,2% menos).

Para esquivar o reducir las comisiones de la cuenta corriente, los bancos ofrecen dos alternativas: domiciliar la nómina (lo que, en algunos casos, implica optar por un producto distinto), o mantener un saldo medio determinado, ya sea en la misma cuenta, en otra o en un depósito. Nueve de los 15 grandes bancos españoles ofrecen esta última alternativa y, de media, requieren que los consumidores tengan un saldo medio de 29.777,89 euros, una cantidad que superan ampliamente entidades como Bankia (75.000 euros, un 151,9% por encima de la media) o Banco Mare Nostrum y BBVA (con 60.000 euros, un 101,5% mas)2.

Ahora bien, entre las nueve entidades que exigen saldos medios determinados para eliminar o reducir las comisiones hay importantes diferencias. Por ejemplo, Kutxabank permite esquivar estos costes con un saldo medio de 4.000 euros (siete veces menos que la media) y Liberbank, con 6.000 (cinco veces menos).

“La normativa vigente4 señala que las entidades tienen libertad para establecer sus comisiones bancarias, siempre que respondan a servicios efectivamente prestados o gastos que pueda haber. Por tanto, llama la atención que, si los cargos por mantenimiento corresponden a la gestión de la cuenta, éstos sean distintos en función del dinero que se mantenga en ella y sean menores cuando el saldo de la cuenta es mayor”, explica la Portavoz de Finanzas Personales de Kelisto.es, Estefanía González.

De los nueve bancos que requieren disponer de esta cantidad en la cuenta, algunos no eliminan las comisiones: simplemente, las reducen. Es el caso de Unicaja (30.000 euros de saldo), Banco Santander (2.501 euros) y Caja España-Duero (500 euros), que aplican rebajas en las comisiones que oscilan entre el 27,5% y el 50%. En total, la rebaja media que realizan las entidades que suprimen o disminuyen los cargos a cambio de un saldo medio es del 76,35%2.

Nómina y productos extra, la otra opción para huir de las comisiones

La otra alternativa que ofrecen los 15 grandes bancos del país para librarse de las comisiones es domiciliar el salario, en cuyo caso la mayoría de las entidades ofrece un producto distinto, con diferente denominación (normalmente se trata de cuentas nómina) y con algunos servicios añadidos, como las tarjetas.

“Sin embargo, para huir de las comisiones no solo bastará con domiciliar una nómina. Todas las entidades (salvo Caja España-Duero) exigen una nómina mínima determinada y solo siete se conforman con que el cliente domicilie el salario (Abanca, Banco Sabadell, Banco Popular, Bankinter, Caja España-Duero, La Caixa y BBVA). El resto también exige mantener un saldo medio determinado o contratar productos adicionales5, como seguros, préstamos o depósitos”, detalla González.

Las entidades financieras justifican estas diferencias en las comisiones por mantenimiento de las cuentas corrientes porque se trata, aseguran, de una cuestión de vinculación con el cliente. Desde Banco Sabadell, por ejemplo, han explicado a Kelisto que “a más vinculación del cliente, más ventajas recibe: menos comisiones, mejores precios en los productos o servicios que contrata... Se trata de un win to win entre el cliente y el banco”. En esta misma línea se manifiestan también Banco Popular y La Caixa, que recuerdan que la fidelidad tiene ventajas.

Desde Bankinter detallan que la domiciliación de la nómina permite acceder a un producto diferente, pasando de una cuenta corriente a una cuenta nómina, que no tiene comisión de mantenimiento. No obstante, apuntan, existen unas comisiones máximas que se pueden cobrar, pero las entidades tienen unos márgenes para mejorar las condiciones de los clientes, especialmente, de aquellos que tienen más vinculación con el banco.

Cinco cosas que debes analizar para conseguir una buena cuenta corriente

1. Las comisiones

Antes de decantarte por una oferta, examina si cuenta con algún tipo de comisión y qué te pide a cambio de eliminarlas. En las cuentas corrientes, los cargos más comunes suelen ser los de mantenimiento y administración, pero también podrían aplicarte otros como los que se cobran por retirar dinero de una oficina distinta a aquella en la que abriste tu cuenta o los gastos de correo (si te envían correspondencia a tu domicilio). Lo más conveniente es que elijas una cuenta que te cobre poco y no te exija prácticamente nada: ni saldos medios, ni nómina o recibos domiciliados, ni productos vinculados. En el mercado hay algunos ejemplos:

2. Las tarjetas

Es importante que analices si la cuenta que vas a elegir te permitirá contar con una tarjeta de débito, ya que se trata de la herramienta más sencilla para disponer de tu dinero. Consulta si la tarjeta tiene algún tipo de coste y en qué cajeros te permite sacar dinero gratis.

3. La devolución de un porcentaje de lo que pagas

Entre los beneficios extras que puede ofrecerte una cuenta corriente está la devolución de un porcentaje de los recibos que tengas domiciliados o de las compras que realices en determinados establecimientos. Es lo que sucede, por ejemplo, con la Cuenta Sin Nómina, de ING Direct.

4. Promociones y regalos

Los regalos siguen siendo uno de los grandes reclamos de las entidades financieras para atraer nuevos clientes. Eso sí, no debes dejarte llevar por su atractivo: los obsequios, como cualquier otra ganancia, están sujetos al pago de impuestos y, en muchos casos, a un período de permanencia en el banco que puede llegar a los 36 meses.

5. Saldos medios mínimos

Algunas entidades exigen mantener un saldo mínimo medio de dinero en la cuenta en todo momento para no cobrar comisiones. Para calcularlo debes sumar el saldo del que dispones cada día y dividir la suma global por el número de días. Por ejemplo, si durante una semana has tenido 1.000 euros en la cuenta (en total, 7.000 euros para 7 días), los siguientes 10 días tienes 2.000 euros (20.000 euros para 10 días) y los siguientes 13 días, 1.500 euros (19.500 euros), el saldo total es de 46.500 euros, que deberás dividir entre 30 días. El saldo medio de tu cuenta para ese mes será de 1.550 euros.