El FMI mejorará sus previsiones sobre España

Más allá de los informes, ruedas de prensa y encuentros a puerta cerrada con el jefe de la misión del Fondo Monetario, la cara del ministro de Economía y Hacienda Luis de Guindos lo dijo todo. Incluso, más cuando reconoció que España ya no estaba en boca de todos. «Es mejor que hablen poco de uno», indicó el ministro al término de la rueda de prensa con los periodistas españoles en una sala del Banco Mundial en las reuniones de primavera.

Ahora restan las conclusiones del grupo de expertos del Fondo que analizan la economía española, que se publicarán este año en el conocido Capítulo IV. Los emitidos el pasado año indicaron que la economía española seguirá una recuperación lenta. Pero, ya en esta pasada reunión de primavera, el FMI reconoció que las previsiones que se modificarán se harán para reflejar una mejoría de la economía española respecto al pronóstico conservador de 2013. Ya en el último informe emitido a primeros de abril, se indicó que la recuperación económica en España se consolida con una estimación de crecimiento del 0,9% este año y el 1% en 2015. Y como se ha citado anteriormente, se espera que en el análisis del Capítulo IV las conclusiones vuelvan a mejorar.

Mientras en el periódico conservador periódico «The Wall Street Journal» estos días se ha resaltado «el crecimiento de la economía de España a su ritmo más rápido en seis años» Todavía se destacan los esfuerzos para mantener el «crecimiento en los próximos meses debido al alto desempleo y el riesgo de deflación».

En la agencia de noticias Reuters, también se llama la atención sobre la mejoría del crecimiento de España. En cambio, se recordó que «la mejoría económica todavía tiene que llegar a las familias españolas».

Desde la agencia de noticias Associated Press, se destaca en uno de sus últimos artículos, distribuidos entre los medios de comunicación de Estados Unidos, que «los recortes del Gobierno en gasto y el aumento de impuestos junto con las reformas económicas han ayudado a restaurar la confianza de los inversores en España».

Pero, sin duda, pertenecen al pasado los artículos en los que se analizaban las terribles consecuencias de un supuesto derrumbamiento de la economía española para Europa y Estados Unidos. Ahora las palabras «proyecciones más brillantes» sustituyen a las utilizadas, sobre todo por los medios de comunicación más conservadores, para ilustrar un posible desastre.

Hace dos años, en la campaña presidencial de 2012, la crisis española formó parte de la agenda de los candidatos. El presidente Barack Obama mencionó la economía española en diferentes ocasiones. Y en la rueda de prensa de cierre de la Cumbre de la OTAN, la cual se convirtió en económica debido a la necesidad de abordar la situación de entonces en Europa, instó al BCE a dar margen a países como «España» o «Italia».