Foro Davos

La economía global, mejor de lo que valoran los mercados

La directora gerente del FMI, Christine Lagarde; el consejero delegado del Credit Suisse, Tidjane Thiam, o el gobernador del Banco Central de Japón, Haruhiko Kuroda, en una jornada del Foro Davos.
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde; el consejero delegado del Credit Suisse, Tidjane Thiam, o el gobernador del Banco Central de Japón, Haruhiko Kuroda, en una jornada del Foro Davos.larazon

Las perspectivas de la economía global para 2016 son mejores de lo que valoran los mercados, asustados porque China ha dejado de crecer a un ritmo exponencial y por los precios del petróleo históricamente bajos, lo que les hizo tener el peor comienzo de año en registros.

Así lo analizaron en el Foro Económico Mundial de Davos La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde; el consejero delegado del banco Credit Suisse, Tidjane Thiam, y el gobernador del Banco Central de Japón, Haruhiko Kuroda, entre otras personalidades.

Los riesgos, sin embargo, existen y tienen que ver con la profunda transición de la economía china, la posibilidad de que las materias primas bajen todavía más de precio -afectando a los países exportadores- y las políticas monetarias carentes de sincronización.

La tarea que se ha trazado el Gobierno chino es triple y consiste en mover la economía de una base industrial a una de servicios, cambiar su orientación de la exportación al mercado doméstico y de la inversión al consumo, explicó Lagarde, quien resaltó que incluso con estos enormes desafíos China creció un 6,8 por ciento en 2015.

Thiam, por su parte, aseguró que los análisis de su banco apuntan a un "aterrizaje suave"de la economía China y que su crecimiento "no nos preocupa".

Del precio del crudo, el responsable ejecutivo del segundo banco de Suiza sostuvo que no es un problema creado por la falta de demanda, sino por la oferta, y precisó que la demanda neta de petróleo aumentó en 2015 en 1,2 millones de barriles diarios".

"Los precios bajos del petróleo son buenos para la economía mundial, para el consumo en Estados Unidos, para Europa y para 5.000 millones de personas en países que son importadores netos", opinó.

India es una prueba ello, como lo comentó su ministro de Economía, Arun Jaitley, quien participó en el mismo debate en el Foro de Davos.

Reconoció que "los precios del petróleo han sido útiles para sostener el crecimiento de su país, que este año se espera sea del 7,5 por ciento.

Sobre las políticas monetarias carentes de sincronía, Lagarde comentó que su efecto está siendo depreciar los tipos de cambio de algunas economías emergentes y generar flujo de capitales desde estas y de países de ingresos bajos hacia las economías avanzadas.

Sin embargo, Kuroda rebajó la seriedad de este problema señaló que simplemente "refleja la divergencia de las situaciones financieras"de los países, mientras que Thiam mencionó que "esto es más o menos inevitable".

"Si todos comenzaran a salir de las políticas monetarias expansionistas podría ser peor", advirtió el responsable del Banco Central de Japón.

El consejero delegado de Credit Suisse descartó cualquier riesgo de contagio con los bancos, ya que con 44 billones de dólares de capital "incluso si hay una conmoción mayor, el sistema puede soportarlo".

Contrariamente a los datos puramente económicos que según Thiam han provocado "reacciones excesivas del mercado", los analistas dijeron que la manera como se desarrolle la crisis de refugiados en Europa y las negociaciones del Reino Unido con el resto de la Unión Europea para evitar su salida se han posicionado como factores de alto riesgo.

Durante el debate, Lagarde, sostuvo que la crisis de refugiados y migratoria en Europa ha llegado a un punto en el que debe ser resuelta o puede amenazar la supervivencia de espacio Schengen, referido al de libre circulación de personas.

La posibilidad de una salida del Reino Unido de la UE es una amenaza que penderá sobre el bloque hasta que se realice el referéndum a este respecto al que se ha comprometido el primer ministro británico, David Cameron.

"El Reino Unido desea obtener mecanismos de protección y acuerdos duraderos para coexistir con la Eurozona. Estas son sus metas en la negociación con el resto de la Unión Europea para seguir siendo parte de ella", indicó el ministro de Economía británico, George Osborne, en el mismo debate.