El Gobierno suprime los objetivos de déficit eléctrico

El fuerte desajuste en el déficit de tarifa eléctrico en 2012, que en los diez primeros meses del pasado año alcanzaba los 4.030 millones de euros, cuando el objetivo para el conjunto del año era de 1.500 millones, ha forzado al Ejecutivo a suprimir de un plumazo el tope establecido en 2012 y el objetivo de dejar a cero el déficit este año. La eliminación de la normativa que desde 2010 contemplaba la imposición legal de reducir progresivamente la generación de déficit de tarifa hasta dejarlo a cero en 2013 fue publicada en el BOE el pasado 31 de diciembre dentro de la normativa que regula a los empleados del hogar.

Este tope legal implicaba que aquellos desajustes entre el objetivo de déficit y las cuentas finales eran trasladados al tramo regulado (la mitad del recibo, la otra mitad es el coste de la energía).

Según esta imposición legal, el Ejecutivo hubiera debido encarecer los peajes de acceso para hacer frente a un desajuste en 2012 que el sector eléctrico estima en cerca de 3.500 millones de euros, pues las fuentes consultadas por este diario aseguran que el déficit del pasado ejercicio, cuya liquidación se conocerá en marzo, se irá a unos 5.000 millones de euros.

En este sentido, el decreto-ley modifica la ley del sector eléctrico para permitir titulizar –es decir, emitir como deuda con el aval del Estado– el desfase generado en 2012. De esta manera, el Ministerio de Industria, que dirige José Manuel Soria, evita tocar los peajes de acceso (la mitad de la tarifa que regula el Gobierno) y subir el recibo de la luz hasta nivelar el desajuste.

Por contra, serán las grandes compañías eléctricas las que deban financiar la fuerte diferencia entre ingresos y gastos del sistema a la espera de que se titulice esa deuda por parte del Estado.

Estos desajustes no han dejado de aumentar como consecuencia de las primas que reciben las energías renovables (9.000 millones el pasado año) y por la financiación de los intereses del déficit (otros 2.000 millones). Al fuerte desequilibrio se suma la caída de la demanda y los 1.217 millones de euros de sobrecostes del sistema extrapeninsular que no asumieron los Presupuestos Generales del Estado para no presionar más la deuda pública.

La fuerte deuda acumulada desde la implantación de las energías cuya generación resulta más cara impulsó al Gobierno a establecer una batería de medidas fiscales, entre las que destaca una tasa del 7% a la generación de energía. Sin embargo, la decisión de eliminar el objetivo de «déficit cero» en el sistema eléctrico para 2013 parece aventurar –según indican fuentes del sector– que las reformas serán insuficientes para dejar nivelado el sistema.

Asimismo, también establece que se suspenderá el programa de ayudas para las instalaciones del régimen especial (renovables y cogeneración) que no estén finalizadas en el plazo previsto, a pesar de que tengan reconocido el derecho a recibir primas. Así, las instalaciones tendrán que contar «con todos los elementos, equipos e infraestructuras necesarios para producir y verter energía al sistema eléctrico».