Irlanda

La emisión de 600 millones en bonos del gestor para este año se complica

La Razón
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MADRID- Será muy difícil que el ADIF cumpla con su objetivo de emitir 600 millones de euros en bonos este ejercicio, tal y como se había propuesto. Según han explicado fuentes conocedoras de la operación, el gestor de infraestructuras ferroviarias se ha topado con un par de inconvenientes que están dificultando la operación. Por una parte, aunque la decisión está tomada, la segregación de la compañía en dos, una para englobar los servicio de AVE y otra para los convencionales, todavía no es una realidad. El nuevo Sistema Europeo de Cuentas (SEC) impone que al menos el 50% de los ingresos operativos de una empresa pública tengan que estar cubiertos con fondos procedentes del mercado si no quiere que su deuda compute en el déficit público. Ahora mismo, el ADIF suma un pasivo de unos 14.000 millones de euros, la mayoría ligados a los corredores del AVE. Con la segregación, la nueva compañía en la que quedarían los servicios de alta velocidad asumiría la mayoría de esa deuda evitando endosarle al déficit público una pesada carga. El hecho de que el proyecto todavía no se haya materializado genera cierta incertidumbre entre los potenciales interesados en los bonos, explican las fuentes.

El otro motivo tiene que ver con la fiscalidad. El ADIF, como empresa pública, debe identificar la nacionalidad de los bonistas para que se les practiquen las retenciones, algo que no ocurre en el caso de las sociedades privadas, en las que son los propios bancos los que se encargan de esta cuestión. Este proceso podría llevar varios días y, como explican los consultados, nadie quiere invertir en un producto que no vaya a tener liquidez aunque sea tan sólo durante unos pocos días. El gestor está en conversaciones con Hacienda para tratar de solventar este inconveniente.

Aunque la compañía que preside Gonzalo Ferre no cumpla finalmente con su deseo de emitir este año, la compañía tiene cubiertas sus necesidades de financiación para este ejercicio, pues los fondos que pretende captar en el mercado están destinados a inversiones para el año próximo. «Si la emisión no se hace ahora, se hará en 2014», explican estas fuentes, que recuerdan que el ADIF ya ha firmado un crédito puente de 890 millones de euros con seis entidades financieras, que devolverá con el dinero captado con los bonos que emitirá en Irlanda.