Jubilación

Las pensiones caerán casi un 2% en 2020 si el Gobierno no las vincula al IPC

Las prestaciones volverán a calcularse con el índice de revalorización, por lo que perderán un 1,87% de su poder adquisitivo si Sánchez no recurre al «decretazo». Solo hay dos trabajadores por cada pensionista. Baleares tiene tres ocupados por cada pensionista y Asturias, solo uno

Las pensiones caerán casi un 2% en 2020 si el Gobierno no las vincula al IPC
Las pensiones caerán casi un 2% en 2020 si el Gobierno no las vincula al IPClarazon

España cuenta con 18,81 millones de trabajadores afiliados a la Seguridad Social y 8,7 perceptores de una pensión, por lo que apenas hay dos trabajadores cotizantes por cada pensionista, una ratio que podría convertirse en un serio problema a corto plazo, cuando los trabajadores del conocido como «baby boom» –los nacidos entre finales de los años 50 y principios de los 70– lleguen al final de su vida laboral.

Según datos oficiales facilitados por la Seguridad Social, el gasto en pensiones subió en agosto hasta los 9.681 millones de euros, un 5,3%, a causa, principalmente, del impacto registrado por la entrada al sistema de colectivos que se jubilaron anticipadamente entre enero y marzo.

Pero el dato más preocupante hay que buscarlo en la propia revalorización de las pensiones, uno de los grandes argumentos esgrimidos por el Gobierno ante la opinión pública. Según un informe realizado por Willis Towers Watson, el valor real de estas prestaciones caería un 1,87% si se aplicase el índice de revalorización de las pensiones (IRP) sin tener en cuenta el suelo del 0,25% ni el techo (IPC+0,5%) fijados por ley. Hay que tener en cuenta que, si el Gobierno no lo impide, el próximo 1 de enero la revalorización volverá a calcularse en base al IRP en lugar de con el IPC, por lo que su aplicación sin topes permitiría volver ajustar paulatinamente los gastos a los ingresos del sistema, pero a cambio de no garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo de los pensionistas. A pesar de que el Congreso aprobó la no aplicación de este índice para 2018 y 2019, el sistema sigue pendiente de su futura derogación con la intención del Gobierno de vincular definitivamente las subidas al IPC.

El valor de -1,87% mantiene la alerta sobre la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones, ya que según el cálculo del Observatorio, las pensiones tendrían que haber caído un 2,52% en 2016, un 2,96% en 2017, un 2,58% en 2018 y un 2,13% en 2019, según el IRP teórico que publicaba la Seguridad Social en su informe económico financiero de los Presupuestos. Los únicos aspectos positivos hay que centrarlos en que el IRP adelantado es mejor que el descenso calculado para 2019 y que el incremento de los ingresos en las arcas públicas se ha elevado más de un punto, pasando del 2,41% al 3,76%

Sin embargo, las cifras dejan claro que la no corrección del déficit aumentará su deterioro, al ser mayor el déficit estructural del sistema, y todo sin que la inclusión de una transferencia adicional en los Presupuestos de 2018 y 2019 para cubrir el pago de las prestaciones haya mejorado la situación de la liquidez del sistema, por lo que Willis Towers Watson aconseja separar las fuentes de financiación. Las conclusiones apuntan a que puede ponerse en riesgo el cumplimiento con el Pacto de Toledo.

España estaba a finales del mes de julio en cifras récord, tanto de cotizantes ocupados, con 19,3 millones de personas, como de pensionistas, con 8,8 millones
–las cifras oficiosas de agosto suavizan estas cifras: 18,81 millones de trabajadores afiliados y 8,7 perceptores de una pensión–, lo que deja la tasa de dependencia en el 2,18, una cifra que presenta diferencias territoriales muy acusadas. Las distintas situaciones sociolaborales y las diferentes composiciones demográficas de cada zona generan situaciones tan alejadas como que Baleares lidere el ranking, con 3,45 trabajadores por cada pensionista, y que Asturias lo cierre con 1,36.

La tasa de dependencia actual es inferior a la de hace diez años (2,31), cuando había 7,7 millones de pensionistas y 17,96 millones de ocupados, momento a partir del cual la recesión económica incidió sobre el empleo, en tanto que el número de pensionistas mantuvo su tendencia al alza. Así, la relación entre cotizantes ocupados y pensionistas pasó su peor momento en 2013, cuando en lo más agudo de la crisis se quedó en 1,95, aunque en la anterior recesión de principios de los años 90 llegó a ser inferior a 1,90.

Si además de los ocupados se tienen en cuenta los desempleados con prestación o subsidio contributivo, en total habría 20,46 millones de cotizantes.

100.000 pensionistas más al año desde 2007

Con fecha 1 de julio se pagaron pensiones públicas a 8.849.299 personas, un número que ha ido sumando unos 100.000 pensionistas anuales de media desde 2007. La mayor parte recibe pensiones de jubilación (5,9 millones de personas). Las cifras irán en aumento por la curva demográfica, mientras la afiliación a la Seguridad Social seguirá ligada a la situación económica.