Empresas
«Renting», el sector vuelve a ir sobre ruedas
«Esta modalidad de arrendamiento es un gasto fiscalmente deducible y no moviliza recursos de las empresas»
La industria ha consolidado su recuperación. Los expertos pronostican crecimientos por encima del 15% este año.
«Conduzca y olvídese de todo lo demás». En esta frase podría resumirse la actividad del «renting» de vehículos. Se trata de un sector que, en los dos últimos ejercicios, ha vivido un auténtico florecimiento, con crecimientos anuales de dos dígitos. El pasado año se matricularon 172.321 automóviles para este fin, un 20% más que en 2014, lo que significa que el 14,22% de total de los coches matriculados en España fueron de «renting», lo que convierte a esta industria en una de las principales impulsoras de la recuperación de las ventas de coches en nuestro país. La flota también se incrementó hasta los 447.623 vehículos, lo que representa un aumento del 9,69%.
El sector prevé que esta tendencia continuará en 2016, con subidas por encima del 15% en matriculaciones y del 9% en flota. A la espera del cierre del año, de momento, los datos a octubre, ya adelantan que éste será de nuevo un buen ejercicio. Y es que el mes pasado el «renting» de todo tipo de vehículos registró un aumento del 15,3% respecto al mismo mes del año pasado, lo que supone un incremento casi cuatro veces superior al de las matriculaciones totales, que avanzaron a un ritmo del 4%.
Se trata, sin duda, de datos muy positivos para un sector que, tras varios años en los que ha sufrido en sus propias carnes la virulencia de la crisis, ha consolidado, especialemente en 2014 y 2015, su recuperación. Y es que esta modalidad de arrendamiento de vehículos tiene una correlación muy elevada con la situación económica y con la actividad de las empresas, ya que son éstas sus principales clientes. Agustín García, presidente de la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), achaca, precisamente, estas cifras a la buena marcha económica en general y al buen comportamiento de dos sectores concretos: el de pequeñas y medianas empresas y el de particulares, donde se incluye el colectivo autónomo.
Y es que, tal y como asegura Javier León, presidente del Consejo de Renting de la Asociación Española de Leasing y Renting (AELR), «las empresas han venido estirando la vida útil de sus flotas, por lo que, ahora, deben afrontar la renovación sin demora». A ello se une, en su opinión, que, cada vez más, las pymes están descubriendo las ventajas que le aporta esta modalidad de arrendamiento de un vehículo.
Ventajas
Pero ¿en qué consiste el «renting»? Se trata de una forma de alquiler de un automóvil por la que el usuario firma un contrato con una compañía especializada durante un periodo determinado de tiempo –habitualmente 36 o 48 meses– y por una cuota mensual en función del modelo elegido, del kilometraje que va a realizar y de los servicios que desea. El «renting» cuenta con importantes ventajas, ya que, además de la comodidad, el cliente se despreocupa totalmente del vehículo y de su mantenimiento, cuenta con importantes ventajes fiscales para las empresas. A efectos del Impuesto sobre Sociedades, las cuotas de «renting» satisfechas constituyen un gasto fiscalmente deducible. Además, las empresas que, finalmente, se decantan por el «renting» acceden a una serie de ventajas importantes como es la posibilidad de hacer uso del vehículo sin realizar una inversión inicial importante, por lo que no moviliza recursos de la empresa. «El ‘‘renting’’ permite a los clientes realizar proyecciones de gasto a medio y largo plazo, eliminando las ineficientes provisiones de gastos. Asimismo, pueden dedicar todos sus esfuerzos y recursos en su actvidad productiva y no descapitalizarse con inversiones en bienes perecederos», asegura León.
El ahorro es otra de las ventajas de tener un vehículo en régimen de «renting». «Como somos compradores al por mayor, los clientes pueden conseguir precios muy competitivos, tanto el importe del vehículo como en las reparaciones y mantenimientos de los mismos, que luego se repercute a la cuota. El descuento puede superar incluso el 15%. Además, desde el punto de vista operativo, el cliente se despreocupa, porque todas las gestiones, como pago de impuestos o seguros, las realiza también las empresa», añade Agustín García.
Aunque España ha llegado con unos años de retraso al mercado del «renting» en relación con el resto de sus vecinos comunitarios, lo cierto es que, a día de hoy, es uno de los estados de la UE donde los productos son más completos y donde la gestión de flotas es más integral. Así, al mantenimiento y las repaciones, se suma el pago de los seguros, que se prorratea en las cutoas mensuales. Asimismo, la compañía de «renting» se encarga de realizar el seguimiento y el control de la flota, el pago de impuestos, asesoramiento en multas, y la puesta a disposición del cliente de un vehículo de sustitución. El servicio de pago de combustible es otra de las opciones que algunas empresas ofrecen a sus clientes para la administración de su flota.
Particulares
El «renting» continúa siendo una actividad muy vinculada a las empresas. El porcentaje de particulares que demanda este tipo de servicios aún es muy pequeño (apenas el 3%). Sin embargo, desde las distintas asociaciones se trabaja en revertir estar situación, y conseguir duplicar esta cifra en los próximos años. Para facilitar el acceso de las personas físicas al «renting» solicitan al Gobierno que los particulares se puedan beneficiar de ventajas fiscales a través de algún tipo de desgravación en su declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), o que también puedan acceder a los planes de achatarramiento si el vehículo nuevo que adquieren es de «renting». «Entendemos que el acceso de particulares al ‘‘renting’’ beneficiaría tanto a la industria automovíslitica como a Hacienda, ya que se venderían más coches y, por tanto, se pagarían más impuestos», concluye Agustín García.
La pyme, la gran protagonista
Seis de cada diez vehículos de incremento en el parque de «renting» fueron generados por pymes en los nuevesprimeros meses del año. Este dato pone de manifesto que el segmento de las pequeñas y medianas empresas es el que más está tirando del sector en este momento. Actualmente, el 60% de los clientes de «renting» son las grandes compañías, usuarios tradicionales de este tipo de servicios. El 34% lo constituyen pymes, y la tendencia va en aumento, puesto que más del 50% del aumento de la flota se ha generado gracias a estas sociedades, que ya representan casi un tercio del total de vehículos de «renting». Por eso, no es de extrañar que estos porcentajes se inviertan en los próximos años. El objetivo es que en un periodo de ocho o diez años los pequeños y medianos empresarios y los autónomos superen a las grandes corporaciones como demandantes de servicios de «renting». «Las pymes y los autónomos son los que más sufrieron la crisis y, ahora, son las que más nos están aportando. De hecho, el 20% de nuestra flota proviene de los pequeños empresarios», explica Agustín García, presidente de la Asociación Española de Renting.
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