Santiago Menéndez: «Tenemos información muy relevante para investigar los ‘‘papeles de Panamá”»

Santiago Menéndez, director de la Agencia Tributaria, reivindica la importancia del «modelo 720», que ha hecho aflorar 127.113 millones desde 2013

Santiago Menéndez recibe a LA RAZÓN en su despacho después de conocer a través de los medios el contenido de los famosos «papeles de Panamá», unos documentos a los que la institución que dirige, la Agencia Tributaria (AEAT), aún no ha podido acceder. Reitera que el organismo ha hecho un «requerimiento» tanto a «La Sexta» como a «El Confidencial» para que cedan esta información «trascendente» a las autoridades, aún sin éxito, y se muestra firme cuando dice que «la investigación afectará a todos los contribuyentes que figuran en los papeles, independientemente de quiénes sean».

«Nuestras armas contra el fraude nos sirven para estrechar el cerco de los que tenían obligaciones tributarias y no las estaban cumpliendo», dice.

El director de la AEAT, que no puede mencionar a contribuyentes concretos, lanza de esta forma un aviso a todos aquellos grandes capitales que controlaban sociedades opacas en paraísos fiscales con el asesoramiento del bufete Mossack & Fonseca. Leo Messi, La infanta Doña Pilar de Borbón, Imanol Arias, Alex Crivillé, Oleguer Pujol... Los «papeles de Panamá», publicados por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), han hecho aflorar sociedades «offshore» (opacas, sin actividad) surgidas en Panamá de una lista muy larga de personajes públicos.

«Las informaciones que están saliendo –los famosos “papeles de Panamá”– en muchos casos no nos sorprenden», dice el «guardián» de la Agencia, que considera que la confidencialidad que debe respetar la AEAT «nos permite aprovechar el llamado “efecto sorpresa” sobre los contribuyentes que no cumplen la Ley».

Al respecto de las posibles actuaciones supuestamente delictivas y reiteradas de algunos de estos afectados por la investigación de Panamá (otros regularizaron su patrimonio en el exterior a través de la amnistía fiscal), Menéndez resalta que «quien hace eso, piensa que nadie se va a enterar. Y cada vez nos enteramos más. Siempre va a haber casos como éste, igual que casos de corrupción, son inherentes a la condición humana. Lo importante es que las instituciones los detecten y los corrijan. Sea quien sea».

Y prolonga su reflexión al señalar que «en términos generales, los que tienen un comportamiento restrictivo respecto a sus obligaciones fiscales –que, en algunos caso les lleva incluso a tener oculto su patrimonio en el exterior– reflejan también cierto egoísmo en su vida cotidiana. A pesar del volumen de capital que controlan los afectados por los “papeles de Panamá”, muchos no están dispuestos a soltar ni un duro para nada. Ni siquiera los 300 o 500 dólares que cuesta cerrar la sociedad “offshore”».

Repercusión social

Menéndez, que aterrizó en la AEAT en 2013, ahonda en el impacto social de los «papeles de Panamá» y apunta que «la repercusión reputacional de los asuntos fiscales es cada vez más grande en la sociedad». «Cualquier comportamiento reprochable tiene mucho impacto. Quien tiene estos comportamientos es precisamente porque no facilita el pago de los impuestos. Es muy importante que la sociedad conozca esto», subraya.

La Agencia no tiene los documentos, pero ya cruza los datos que va recopilando de todos estos grandes patrimonios con las declaraciones de bienes en el exterior (modelo 720) y las realizadas a través de la «aministía fiscal» de 2012 (modelo 750). «La AEAT ha estado muy atenta a todo lo que se ha ido publicando en los medios de comunicación sobre el tema de Panamá, y empleará todos los medios que tiene a su disposición para las investigaciones», incide Menéndez.

El director de la AEAT presume de que «la información que desde 2012 tenemos sobre bienes en el extranjero será muy relevante para la investigación de Panamá». Además, destaca la importancia de contar con un marco normativo que permita el tráfico de información con las autoridades panameñas. De hecho, aunque no lo dice expresamente y no depende de su departamento, podemos leer entre líneas que, en su opinión, la AEAT trabajará mejor en un caso como este si el país interlocutor no es considerado un paraíso fiscal, el sambenito que siempre persigue a aquellos países con baja tributación.

«Para que Panamá volviera a la lista de paraísos fiscales de España, el acuerdo de intercambio de información tendría que estar fallando. Y no es el caso, está funcionando. Con algunos problemas, pero se están solucionando. Hay que avanzar en el intercambio, no poner pegas. Es importante tener el convenio de doble imposición, es importante poder intercambiar información con Panamá», argumenta el director de la AEAT.

En vez de restricciones informativas, Menéndez apuesta por la apertura de fronteras fiscales. «Tenemos que dirigirnos hacia el modelo de intercambio automático de información, como el FATCA de EE UU, de forma que cada país pueda tener los datos de sus contribuyentes en el extranjero sin tener que realizar una petición expresa cada vez que lo necesite», asegura.

Arma eficaz contra el fraude

Menéndez pone en valor la importancia del modelo 720, «una de nuestras mejores armas contra el fraude fiscal», dice, ya que obliga desde 2012 a los contribuyentes españoles a declarar los bienes y derechos que tienen en el exterior. «Si antes de la Ley Antifraude de 2012 descubríamos a alguien con bienes y derechos en el exterior, sin declarar, y había prescrito el origen de esas rentas, como mucho se le podían liquidar las rentas de los ejercicios no prescritos. Ahora, con el 720, todo el importe del valor pasa a ser una renta imputable al último ejercicio no prescrito y además, como incremento no justificado de patrimonio», remarca Menéndez sobre una de las novedades normativas de cuyos resultados se siente más orgulloso después de casi tres años al frente de la AEAT. Menéndez ilustra la efectividad del 720 con un nuevo dato. Entre octubre de 2015 y abril, es decir, en seis meses, «ha hecho aflorar otros 581 millones de euros de contribuyentes españoles que estaban en el exterior entre 2012 y 2014, y que han sido declarados por primera vez. Entre 2013 y 2016, este mecanismo ya nos ha proporcionado información de bienes y derechos por valor de 127.113 millones en el extranjero».

Grandes capitales «honrados»

El estallido de los «papeles de Panamá» y la lista de morosos que publicó Hacienda han puesto en el disparadero las malas prácticas de algunos de los grandes contribuyentes de nuestro país, pero el director de la AEAT cree que la sociedad «se olvida» de aquellos que lo hacen bien. «Hay cierta injusticia cuando se habla de “los ricos”. Hay empresarios con grandes compañías que son tremendamente cumplidores con sus obligaciones tributarias. Y de ellos, no habla nadie», dice.

La investigación de los «papeles de Panamá» no ha hecho más que empezar y durará varios meses, y la AEAT se encuentra «coordinada al máximo» tanto con el Ministerio Fiscal como con Anticorrupción y el Servicio de Prevención del Blanqueo de Capitales. Mientras sigue el goteo de nombres con sociedades «offshore», Menéndez vuelve a insistir en una idea que, en un país salpicado de casos de corrupción, blanqueo y evasión fiscal, nadie toma en serio. «Repito, actuaremos contra todos. Sean quienes sean».