Coronavirus

La Salle La Paloma, el primer centro que hace un estudio piloto para mejorar la ventilación en las aulas

Tras casi dos meses de análisis, se confirma que un dispositivo de ventilación artificial logra una calidad de aire adecuada a los estándares exigidos sin necesidad de ventilación natural

Un aula del centro La Salle La Paloma
Un aula del centro La Salle La PalomaLa RazónLa Razón

La calidad del aire interior y la ventilación de los espacios cerrados se han convertido en una de las grandes preocupaciones ante la situación sanitaria actual. La peligrosidad de los espacios interiores es una de las temáticas más comentadas y analizadas en las últimas semanas y, por este motivo, las iniciativas que se están dando a conocer para paliar esta problemática han adquirido gran protagonismo. Documentos como la Guía para ventilación en aulas del CSIC o estudios de la Universidad de Burgos alertan de la importancia de la ventilación natural en las aulas, uno de los sectores que más preocupan.

El problema llega cuando en ocasiones esta ventilación no se puede realizar, bien porque quizás el aula no lo permite, al no tener ventanas, o por las temperaturas actuales. En este punto es donde adquiere una gran relevancia el implementar ventilación forzada o purificación de aire y para demostrar su efectividad se ha llevado a cabo el exitoso y pionero estudio de campo del colegio La Salle La Paloma junto a Murprotec.

Esta medición se puso en marcha el pasado agosto con la finalidad de medir y testear la calidad del aire en un aula no ventilada de forma natural.

Murprotec, líder en Europa en el tratamiento contra las humedades estructurales, instaló el pasado 28 de agosto en un aula del colegio La Salle La Paloma una Central de Tratamiento del Aire (CTA). Este dispositivo de última generación aspira aire nuevo tomado del exterior, lo filtra y lo introduce tratado en la estancia. El aire contaminado de la estancia es mecánicamente expulsado al exterior a través de unas rejillas, lo que provoca una renovación continua de aire en el interior combatiendo el posible contagio por aerosoles.

Para el estudio de campo se han utilizado dos aulas en condiciones similares: mismo número de alumnos, misma distribución y mismos metros cuadrados. En el aula sin central de tratamiento del aire, denominada “aula básica”, se han llevado a cabo los protocolos de ventilación natural indicados por las instituciones, mientras que el aula con el dispositivo, denominada “aula CTA”, ha permanecido ventilada mediante el sistema electrónico y en ningún momento ha abierto sus ventanas.

Tras ocho semanas de mediciones (el estudio concluirá a final de año) los datos han confirmado que la CTA puede regular, minimizar y gestionar la calidad del CO2, humedad y temperatura dentro de los parámetros establecidos sin necesidad de abrir las ventanas del aula. En el “aula básica” los índices de C02 en su pico más alto alcanzaron más de 2.500 ppm (partes por millón) mientras que en el “aula CTA” los índices de C02 registraron, según la franja horaria, una mejora en la calidad del aire de entre un 15 y un 35%, en comparación con el aula donde se ha estado ventilando de forma natural.

Visi Salazar, directora del colegio La Salle La Paloma asegura que “desde la dirección del centro el tema de la ventilación en las aulas nos parece prioritario. Por este motivo, ante la propuesta de Murprotec, no dudamos en participar en este estudio y gracias a él podemos conocer nuevos sistemas que ayuden a sanear el aire 100%”. La directora concluye que “para nosotros es muy importante poder ofrecer a nuestras familias opciones que mejoren su seguridad y por este motivo no hemos dudado en sumarnos a este proyecto”.

Por su parte, Miguel Ángel López, director general de Murprotec en España y Portugal afirma que “sabemos que la ventilación natural es la mejor opción para obtener un ambiente interior saludable, pero la realidad es que esto plantea un verdadero dilema al llegar el invierno con la bajada de temperaturas y, sobre todo, en aquellas regiones más frías y lluviosas”. Y añade que “aunque inicialmente nuestra CTA está concebida para eliminar la humedad por condensación, gracias a este estudio estamos confirmando que nuestra tecnología puede ayudar a sanear cualquier ambiente interior más allá de si éste tiene humedades. Este dispositivo puede ser muy útil para épocas de frío, pero también para los espacios que han sido habilitados como aulas debido a las ratios y que no cuentan con una ventilación adecuada”.

Metodología utilizada

Para llevar a cabo este estudio se realizó una cubicación del espacio de ambas aulas antes del comienzo del curso escolar y se localizó el lugar idóneo para colocar el dispositivo.

Las dos aulas analizadas, ambas de unos 40 metros aproximadamente, cuentan con tres grandes ventanales, techos con una altura de 3,5 metros y albergan a 20 alumnos de primaria cada una de ellas.

Para realizar el estudio se han utilizado dispositivos de medición de alta tecnología en ambas clases. Dichos terminales han medido las 24 horas valores como la temperatura, la humedad y la concentración de CO2 del espacio. A través de una aplicación, tanto responsables del colegio, como de Murprotec, han estado recibiendo los datos en tiempo real.

Estudios sobre la importancia de renovación del aire

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha publicado recientemente la Guía para la ventilación en aulas, ante las evidencias científicas sobre el contagio por aerosoles y el mayor riesgo de propagación del COVID-19 en espacios cerrados. Un informe donde trasladan sus recomendaciones sobre la ventilación para evitar la transmisión aérea de la COVID19 e indican que la Universidad de Harvard recomienda como excelente realizar 5-6 renovaciones de aire por hora para aulas de 100 m², con 25 estudiantes de 5-8 años.

El CSIC deja claro que la ventilación natural es la mejor opción y debe ser la primera a tener en cuenta. Si bien este estudio explica que dicha ventilación puede no ser viable debido a condiciones meteorológicas adversas por lo que en estos casos aconsejan implementar ventilación forzada y/o purificación de aire.

En relación a esta necesidad de ventilación de las aulas, el CSIF ha solicitado al Ministerio de Educación y Formación Profesional, a las consejerías de cada comunidad autónoma del ramo, a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y a los ayuntamientos de todo el país que se revisen los protocolos de ventilación en las aulas por la llegada del frío. El sindicato considera fundamental mejorar la calidad de aire de las aulas a través de la instalación de filtros HEPA o dispositivos de purificación de aire.