Seguridad

Francia cierra seis puestos fronterizos con España para prevenir el terrorismo

El dispositivo forma parte de un plan general para evitar la infiltración de yihadistas

Reapertura de los pasos fronterizos España-Francia
Un agente de la Policía Nacional en el puesto de El Pertus, en una imagen de archivo. EFE/David BorratDavid BorratEFE

Lo anunció el presidente francés, Emmanuel Macron, el pasado 5 de noviembre, tras el atentado yihadista de Niza: iban a ser adoptadas medidas para reforzar los controles fronterizos y evitar, como había ocurrido en la referida acción criminal, que se colarán en el país terroristas dispuestos a matar.

En lo que afecta a España, a partir del lunes y por un tiempo indefinido, serán cerrados cinco pasos fronterizos con España por Cataluña, dentro de su dispositivo para reforzar los controles de entrada al país por la última oleada de atentados terroristas.

Los puestos son los de los puertos de Banyuls, Coustouges y de Manrell-Las Illas, así como el de Aja, entre Palau de Cerdanya y Puigcerdà, y la carretera de la Vignole Enveitg.

A ellos hay que sumar el del Portillon, que es un punto de acceso secundario a la Vall d’Aran desde Francia.

Fuentes antiterroristas españolas consultadas por LA RAZÓN señalaron que no existe en estos momentos ninguna amenaza concreta que, en cualquier caso, se hubiera comunicado a Francia dentro de la colaboración existente. Reconocieron que existen precedentes, no sólo en Francia, sino también en nuestro país en que terroristas yihadistas han utilizado las redes de la inmigración para llegar a Europa. A este respecto, no ocultaron su preocupación por lo ocurrido a lo largo del año pasado con la inmigración ilegal que ha tomado las Islas Canarias como paso previo para llegar a la Península. Una cantidad no determinada, varios miles en cualquier caso, han podido viajar desde el archipiélago al tener su documentación en regla, situación que no se cortó hasta que no fue denunciada por los medios de comunicación. “Era una vía tan accesible que pudo ser utilizada por elementos yihadistas”, agregaron.

Macron anunció en noviembre que duplicaba los efectivos de vigilancia hasta las 4.800 agentes. Para hacer este anuncio se desplazó hasta el puesto fronterizo del Pertús, con España, donde dijo que el objetivo es “luchar contra la inmigración clandestina” e impedir que esos flujos sean utilizados por los terroristas.

La decisión se adoptó tras la polémica que se ha generado en Francia por el atentado de Niza contra una iglesia, ya que su autor, Brahim Issaoui, un jtunecino de 21 años, entró a Europa de forma clandestina a finales de septiembre desde su país por la isla italiana de Lampedusa.

Macron reconoció que hay terroristas que “utilizan los flujos de inmigración” y que también se sirven de las redes de narcotraficantes y de quienes trafican con personas. Varios de los terroristas que cometieron los atentados de París de 2015 habían entrado en Europa a través de las redes de la inmigración ilegal.