Ciudadanos

Crisis en Cs: El veto a Sánchez rompe a los de Rivera

El «no es no» al PSOE y los pactos con Vox llevan a Ciudadanos al escenario más crítico desde su fundación. Pese a todo, el partido mantiene su pulso: Moncloa pidió una «reunión discreta» al líder naranja y este la rechazó resuelto a no facilitar la investidura «ni por activa ni por pasiva».

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ayer, durante la reunión de la Ejecutiva de su partido
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ayer, durante la reunión de la Ejecutiva de su partidolarazon

El «no es no» al PSOE y los pactos con Vox llevan a Ciudadanos al escenario más crítico desde su fundación. Pese a todo, el partido mantiene su pulso: Moncloa pidió una «reunión discreta» al líder naranja y este la rechazó resuelto a no facilitar la investidura «ni por activa ni por pasiva».

Se ha especulado mucho últimamente sobre las posibles consecuencias que tendría para Cs romper su promesa de no pactar con Sánchez pero la jornada de ayer dejó claro cuál va a ser el coste de mantenerla: nada menos que la crisis interna más grave desde la fundación del partido en 2006. Tres dimisiones y un tormentoso Comité Ejecutivo en el que se evidenció la ruptura interna del partido es el saldo de este día para olvidar que empezó temprano para Rivera. El diputado, portavoz económico en el Congreso y miembro de la Ejecutiva de Ciudadanos Toni Roldán anunció su decisión de abandonar su escaño y todas las responsabilidades orgánicas en el partido al considerar que el giro a la derecha protagonizado por Albert Rivera y la decisión de vetar pactos con el PSOE hacen imposible seguir trabajando para sus siglas. En declaraciones en el Congreso de los Diputados, Roldán dejó claro que «sigue admirando a Albert Rivera por muchas razones» significativamente por su «audacia extraordinaria» y mostró su convicción de que «todas las decisiones que ha tomado las ha tomado desde la honestidad». Hasta aquí llegaron las buenas palabras porque a continuación el también secretario de Programas y Áreas sectoriales del partido aseguró que se iba de Cs no porque hubiera cambiado él sino porque ha cambiado el significado de sus siglas y la posición centrada que le convertía en la encarnación política de una «tercera España».

La decisión de Roldán solo fue el comienzo. Apenas unas horas más tarde y a petición de los eurodiputados Luis Garicano y Javier Nart dos de los miembros del partido más críticos con el acercamiento a Vox, la Ejecutiva votó sobre la conveniencia de mantener el veto Sánchez y volvió a apoyarlo pero esta vez sin la unanimidad de antaño. El resultado de la votación fue concretamente de 24 votos a favor, 4 en contra y 3 abstenciones. Según informaron fuentes de la formación naranja, los cuatro votos en contra fueron de Garicano, Nart, Francisco Igea, el candidato de Cs en Castilla y León, y Fernando Maura, responsable de Relaciones Internacionales. Las tres abstenciones han sido la de Nacho Prendes, Marta Martín y Orlena de Miguel.

Tras perder esta votación por tan abultado margen se anunció la segunda de las dimisiones de la jornada, la del propio Javier Nart que, de momento, mantiene el escaño en la Eurocámara. La tercera no tardaría en anunciarse ya que, apenas unas horas después el ex rector de la Universidad de Oviedo y número uno de Ciudadanos al Principado de Asturias, Juan Vázquez, decidía poner fin a su efímera carrera política y señalaba que se marchaba porque «han cambiado orientaciones de la formación política a la que me incorporé».

En cualquier caso, la decisión de la directiva del partido de mantener el veto a los socialistas es diamantina y ni siquiera la cascada de dimisiones hizo tambalear la firmeza del partido. Lejos de ello ,y abundando en esta línea férrea, ayer se supo que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, «solicitó una reunión discreta» a Albert Rivera sin duda para sondear las posibilidades que existían de que Cs pudiera facilitar su investidura de alguna manera. Sin embargo, Rivera rechazó dicho encuentro debido a que ya le ha repetido en dos ocasiones «y en persona» que «los electores han querido que Ciudadanos haga una oposición seria, firme y constructiva y que la dirección del partido ha respaldado no apoyar la investidura ni por activa ni por pasiva» de Pedro Sánchez. El breve comunicado del partido naranja recordaba asimismo que Albert Rivera le ha pedido al presidente en funciones en la última reunión pública que formara Gobierno cuanto antes.

En la misma línea se pronunció Inés Arrimadas. La portavoz de Ciudadanos en el Congreso y portavoz de la Ejecutiva, aseguró que Cs seguirá presentándose como alternativa frente al «sanchismo», pese a la cascada de dimisiones. En rueda de prensa en la sede de Cs tras la reunión del Comité Ejecutivo, Arrimadas dejó claro que la firmeza del partido se apoya en que los electores han avalado en las urnas la estrategia impulsada por Rivera de no facilitar la investidura de Sánchez ya que eso fue lo que defendieron durante toda la campaña. «Fuimos a las urnas con ese no a Sánchez y sí a España», para formar «un Gobierno sensato, reformista y liberal» y con ese planteamiento Cs logró «un crecimiento exponencial», así que «seguiremos siendo la alternativa al sanchismo y al bipartidismo caduco», dijo. Una decisión que, según recordó, fue respaldada por el propio Roldán cuando fue sometida a votación en la Ejecutiva el pasado febrero. Y no solo eso: también se aprobó la igual que la estrategia adoptada el pasado 3 de junio sobre los acuerdos postelectorales en municipios y comunidades autónomas.

No pudo faltar en un día tan crítico para el liderazgo de Rivera la puntilla de sus principales enemigos políticos: el PSOE. Fue el secretario de Organización de los socialistas, José Luis Ábalos, quien instó a Rivera a «escuchar a su partido y abstenerse» en la investidura de Sánchez. La mano derecha del presidente en funciones aconsejó al líder de Ciudadanos que «salga de su laberinto» y de la «huida hacia adelante» y que deje de subir «el monte más escarpado a su derecha», porque «no es bueno para nadie y menos para ellos». Por su parte, en declaraciones a Servimedia, el pensador y escritor vasco Fernando Savater, que apoyó a Ciudadanos en las elecciones generales del 28-A, consideró una «paradoja» que se critique al líder de la formación naranja por cumplir su promesa y que si Sánchez quería la abstención de Cs «debería haber propuesto algo a Rivera, igual que se lo ha propuesto a Podemos».