Política

El desafío independentista

"El 155 sin un relato constructivo de España es un suicidio"

Así lo afirma Josep Ramón Bosch, presidente de Societat Civil Catalana, en una entrevista para LA RAZÓN.

Josep Ramón Bosch, presidente de Societat Civil Catalana / Foto: Miquel González-Shooting
Josep Ramón Bosch, presidente de Societat Civil Catalana / Foto: Miquel González-Shootinglarazon

Así lo afirma Josep Ramón Bosch, presidente de Societat Civil Catalana, en una entrevista para LA RAZÓN.

–Con su llegada, ¿SCC endurece su posicionamiento o mantiene la apuesta por el diálogo, que tantas críticas ha generado en algunos sectores?

–Yo siempre he sido una persona de diálogo. No se trata de dialogar con personas que estén en prisión, pero sí es verdad que tiene que haber una apertura de la sociedad. Lo que queremos hacer en SCC es dialogar con los catalanes, no con los independentistas. La solución solo se podrá obtener entre catalanes.

–¿Por qué se destituye a José Rosiñol?

–Yo no he vivido tan internamente todos los problemas de SCC, no se si hubo causas ideológicas. Yo creo que tal y como explicaba el Rosiñol, la crítica que le hacen es que ha sido muy presidencialista y en vez de gestionar internamente, hizo una muy buena gestión externa de SCC, sobre todo después de las manifestaciones de octubre de 2017, pero internamente no fue del todo fluida. Creo que fue una mala gestión interna que genera enfrentamientos personales e ideológicos.

–¿Ideológicos también?

–Hizo el intento de reunirse con la ANC y eso en ciertos sectores de SCC no fue bien entendido.

–Hubo también acusaciones de irregularidades.

–Irregularidades económicas hemos comprobado que no ha habido, e irregularidades administrativas entiendo que tampoco, pero sí creo que no hubo una gestión correcta porque durante un tiempo no se convocó a la Junta y eso provocó discrepancias. Publicaremos en la web las cuentas y la auditoría interna que se ha hecho.

–¿Qué le parece la «operación diálogo» de Pedro Sánchez con Quim Torra?

–Son los presidentes legítimos de España y Cataluña. Dentro de esta legitimidad debe haber dialogo fluido dentro de la ley. Una persona que tiene responsabilidades políticas no se puede saltar la ley. Pero por lo que vemos Torra no tiene intención de cumplir la ley, si no la cumple, la ley tiene las suficientes armas para instruirle. Pero a favor del dialogo siempre estaré.

–Es decir, a favor de la apertura al diálogo.

–Yo doy apoyo pleno apoyo al Gobierno sin ninguna duda ni cortapisas.

–Si avala la estrategia del Gobierno, ¿qué opina de que los otros dos partidos constitucionalistas, PP y Ciudadanos, pidan el 155?

–Aplicar el 155 y judicializar la vía catalana sin un relato positivo y constructivo de España es un suicidio. Cataluña vive una triple división terrorífica en estos momentos (económica, geográfica y lingüística). Esta división se va acentuando porque los independentistas se alimentan de TV3 y de los diarios subvencionados de la Cataluña interior en catalán, y los españolistas se alimentan de Antena3, La Sexta y diarios en castellano. Aplicar un 155 incrementaría aún más esta división. Yo sería el primero en firmarlo si se incumple la ley, pero se tiene que hacer con un relato contundente de convencimiento a los catalanohablantes, para que un 20-25% que se han movido al independentismo vuelvan a ser catalanistas. Me he roto la cara por defender a España, pero creo que el discurso de PP, Vox o Cs no va por buen camino.

–¿Cómo afronta SCC las elecciones municipales y europeas?

–En estos momentos no está decidido todavía, pero SCC debe tener voz y voto en estas elecciones. Hay que volver a ser esa voz fuerte y potente. No queremos estridencias.

–¿Cómo prevé el juicio a los líderes separatistas?

–Creemos en la separación de poderes. Esto es un Estado de Derecho y todas las instituciones internacionales dicen que España es una democracia plena.

–¿Calificaría de golpistas a los presos?

–Lo que se vivió, sobre todo, el 6 y 7 de septiembre sí que fue un golpe de Estado. En la democracia, lo importante no es votar sino respetar las leyes, porque sin eso no hay democracia. Cuando uno se salta la ley, es un delincuente y debe ser juzgado. En aquel caso, era un cambio de Constitución y del sistema de gobierno de forma ilegal. Se podría llamar golpista, aunque no es un término que a mí me guste.

–¿Cómo valora al Govern de Torra?

–Un desastre absoluto, no tengo ninguna valoración positiva. No se ha aprobado ninguna proyecto de ley. Vivimos unicamente para el «procés», y él ya dijo que es un presidente títere de un fugado en Waterloo. Todas sus acciones han ido dirigidas a favorecer el «procés» y las listas de espera siguen. Han sido incapaces de hablar con la oposición y la tensión social sigue en la calle.

–¿Está dispuesto a reunirse con él?

–Es el presidente de la Generalitat, es mi presidente. Puede gustar más o menos, pero es mi presidente. Por tanto, desde un punto de vista institucional le debo respeto, y como asociación que forma parte del tejido asociativo catalán, si el cree que debo ir a verle, le iré a ver.