Caso Nóos

«El conde de Fontao recomendó que se cuidaran las apariencias»

Diego Torres aseguró al juez que Urdangarín «no quería ser un florero» y que «se resistía» a dejar el Instituto Nóos

La Razón
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«Es rotundamente falso». Con esta contundencia Diego Torres negó el pasado sábado ante el juez José Castro que José Manuel Romero, conde de Fontao, conminase en marzo de 2006 a Iñaki Urdangarín, a instancias de la Casa del Rey, a separarse de él.

D.T.: «No tengo la menor duda, eso es rotundamente falso. Se dice continuamente que el Sr. Romero vino con el encargo de que nos separáramos (...) Nos íbamos viendo (con Urdangarín y el conde de Fontao) de vez en cuando, como otras personas nos han asesorado, nos han dado consejo, cuando la Prensa ha criticado alguna actuación, nos hemos reunido enseguida para valorarlo».

A raíz de las criticas mediáticas a los proyectos de Nóos, explica Torres, Romero les asegura que «esto es insostenible», por lo que el duque de Palma no podrá seguir trabajando en labores de consultoría y «tendrá que hacer otra cosa».

Juez: «Entonces, ¿quiere decirnos qué encargo fue el que transmitió el Sr. Romero?».

D.T.: «Que don Iñaki tendría que dejar este tipo de actividades, tendría que dedicarse a otras cosas, como después salió a la Fundación (Arete y, posteriormente, Deporte y Cultura), como después salieron otros consejos de administración y el Instituto Nóos, iría acabando los encargos que tendría e iría dejando de tener actividad. El Instituto Nóos ya cuando se crea, se crea exclusivamente para el Sr. Urdangarín, si no yo hubiera seguido con actividades de consultoría».

Juez: «Según el Sr. Urdangarín se le prohibió mantener contactos de negocios con usted».

D. T.: «Yo he tenido muchas reuniones con el Sr. Romero y con el Sr. Urdangarín, y a mí jamás se me ha dicho ni lo he oído, ni lo he percibido, ni entre líneas. Además el Sr. Romero ha seguido después asesorándonos en la constitución de la Fundación, donde sabía perfectamente que yo ayudaba, incluso el sr. García Revenga y el sr. Romero han visto documentación de proyectos de consultoría en los cuales colaborábamos con don Iñaki meses y años después».

Torres asegura que él estuvo en la reunión en la que Romero le transmitió a Urdangarín esa recomendación. «Estuvimos debatiendo los tres y opinando los tres y la opinión del Sr. Romero y la mía eran coincidentes, aunque era muy duro y muy difícil de aceptar por el Sr. Urdangarín». Es entonces cuando el conde de Fontao le transmite al duque de Palma que «mejor se fuera dedicando a otro tipo de actividades». «Se determinó en esa reunión que su salida formal se hiciera cuanto antes para apaciguar un poquito la sensación de crítica que estaba recibiendo don Iñaki».

D.T.: «Pero don Iñaki seguía detrás de los proyectos, y esto tampoco era ajeno».

Juez: «Entonces, ¿por qué se hace ese simulacro de apartamiento?».

D.T.: «Supongo que por esa presión mediática y por decir "ya lo estoy dejando"».

Juez: «¿Por qué no lo dejó?».

D.T.: «Don Iñaki seguía teniendo mucho interés en estas actividades».

Juez: «Porque según tenemos nosotros noticias por don Raimón Bergós, que lo dijo espontáneamente, el Sr. Urdangarín podía hacer lo que le viniera en gana, siempre y cuando no figurara en los órganos de administración de ninguna entidad. ¿Eso es cierto?».

D.T.: «En esencia lo que el Sr. Romero le vino a decir era así».

A partir de ese momento, y dado que «don Iñaki se resistía», explica Torres que «el mensaje que se le transmitía desde la Casa Real es que no se preocupara que ya se le conseguirían Consejos de Administración y que por lo tanto la parte económica la tendría resuelta. Pero él, sinceramente, yo creo que eso le honra, no quería ser un florero y lo que quería es poder tener un desarrollo profesional. Lo que entre el Sr. Romero y otros amigos se le vino a aconsejar, oye separa, tendrás tus fuentes económicas de donde sea y puedes dedicarte a temas relacionados con el deporte, pues por ejemplo a través de una Fundación. Eso le pareció en ese momento buena idea, al Sr. Romero le pareció estupendo y se empezó a diseñar».